Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
+11
Usagi
Staket
shiibi
DANNYKAZU
z@b-€r
Musashi_Ushinaru
Nyaomi
Princesa Saranini de Ueda
yuuko_jin
Hime_Shinku
Kashi
15 participantes
Fiction Asian Lovers :: Fan Fics :: Boy x Boy Love :: Proccess :: Johhny's
Página 5 de 6.
Página 5 de 6. • 1, 2, 3, 4, 5, 6
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
QUE??? COMO ES ESO DE QUE JINJINCITO NO ALEJO A KAME????????? mi amor mio!!!! no es justo esto!!! mi no quiere akame mi quiere jinda!!! se dirige hacia el colegio y busca a kame
en ese colegio esta arreglado los juegos por que es sede de ellos!!!!! por eso ganaron todos los partidos!!!! eso es trampa!!!! nadie de ese colegio perdió!!!!
ryo es un pendejo, le pide que se aleje por que el kato anda enamorado de el u.u
por que le da de comer rico si le engaña con una mascota, digo con kame!
Disculpe, pero lo que ha hecho no es correcto. *0* que mono!!!!!!!!!!
tuve la ilucion de que era ryo quien corrió por shige y no keii
hay posibilidad!!! katito!!!! no te rindas ryo ya es tuyo!!! probo la frutita prohibida!!!!! >.< muri!!!
queja!!!!!!!!!!!: dijiste que era mas largo, a mi esto no me fue largo!!!!!!!!!
en ese colegio esta arreglado los juegos por que es sede de ellos!!!!! por eso ganaron todos los partidos!!!! eso es trampa!!!! nadie de ese colegio perdió!!!!
ryo es un pendejo, le pide que se aleje por que el kato anda enamorado de el u.u
por que le da de comer rico si le engaña con una mascota, digo con kame!
Disculpe, pero lo que ha hecho no es correcto. *0* que mono!!!!!!!!!!
tuve la ilucion de que era ryo quien corrió por shige y no keii
hay posibilidad!!! katito!!!! no te rindas ryo ya es tuyo!!! probo la frutita prohibida!!!!! >.< muri!!!
queja!!!!!!!!!!!: dijiste que era mas largo, a mi esto no me fue largo!!!!!!!!!
Princesa Saranini de Ueda- Mensajes : 2587
Fecha de inscripción : 07/01/2011
Edad : 35
Localización : en UEPOPUTOPIA : soy la princesa hada que sirve al principito Ueda
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
kyaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!! fa dsfakjgluevufbhekrbnfvakghbekrjh!!!! >w<!!!!!!! me gustooooooooooooooooooooo!!!
kato y ryo se besaroooon!!! :O! pero el tegopi.. ya no se kieren?... porke ryo evita enamorarse de shige?.. tiene miedo? pfffff shige baboso! >0<!
mi kiere akameee!!!! ;^;
kyaaa me gusta fa!♥ gracias!! cumpliste tu promesa te kiero *w*!
kato y ryo se besaroooon!!! :O! pero el tegopi.. ya no se kieren?... porke ryo evita enamorarse de shige?.. tiene miedo? pfffff shige baboso! >0<!
mi kiere akameee!!!! ;^;
kyaaa me gusta fa!♥ gracias!! cumpliste tu promesa te kiero *w*!
Usagi- Mensajes : 90
Fecha de inscripción : 13/09/2011
Edad : 34
Localización : con Teshi a mi lado♥ *w*
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
Pobre Shige~
esta sufriendo mucho por ese Ryo malo uwu!!
encima esta con todo ese problema y Kusano le pega ;---;!!
aunque.. creo que empiezo a comprender los motivos~
pobre Kusano tambien, Kei jamas le hara caso, y menos
si sigue maltratando a Shige Dx
Quiero que el TegoPi este junto, Tego sufre mucho y Pi tambien,
aunque la culpa es de Tego por seguir sin sincerarse
Continuacion~
esta sufriendo mucho por ese Ryo malo uwu!!
encima esta con todo ese problema y Kusano le pega ;---;!!
aunque.. creo que empiezo a comprender los motivos~
pobre Kusano tambien, Kei jamas le hara caso, y menos
si sigue maltratando a Shige Dx
Quiero que el TegoPi este junto, Tego sufre mucho y Pi tambien,
aunque la culpa es de Tego por seguir sin sincerarse
Continuacion~
Arioka_shinku- Mensajes : 39
Fecha de inscripción : 26/12/2011
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
[Yamashita]
Cualquiera en mi posición ahora quizás tendría otro humor. El lugar, el momento, la persona, todo lo que cualquier adolescente desearía. Si tan sólo sintiera por mi novia una insignificante chispa de deseo, un poco es lo que pido… pero no llega.
-Maki-chan… este… - sigue besando con desesperación mi cuello – debo ir a casa – la levanto de la cintura y la alejó de mí, me levanto del sillón y recojo mis cosas.
-Tomo-chan… - abrocha su camisa de forma coqueta - ¿quieres respetarme hasta el matrimonio? – Sonríe, se muerde el labio… salgo de su casa sin darle explicaciones. Ya darle un beso es un insulto a mis verdaderos sentimientos, no podría acostarme con ella, la sola idea… me asquea.
Pero parece que mi tormento no acaba. No sólo tengo que aguantar estar con Maki, también tengo que aguantar no estar con Tegoshi. Sus padres se fueron de nuevo ayer por la noche así que la pasará en mi casa hasta que vuelvan. Ayer, la primera noche; fue insoportable estar metidos los dos en la misma habitación; ahora al parecer le ha encontrado un uso a su futon pues no se infiltró en mi cama a la media noche como solía hacerlo. Deseaba que lo hiciera… pero no pasó. Aunque al menos ya hablamos un poco más; aparte de los ‘buenos días’ ‘buenas noches’ y ‘gracias’ hoy en el desayuno me dijo ‘pásame la mantequilla’ ¿se puede considerar un avance? Yo creo que sí… y uno muy grande, aprovechando eso hablaré esta noche con él.
Ahora estamos cenando. Es tedioso, así mi madre se dará cuenta de que algo no anda bien y paso de andarle inventando explicaciones.
-¿Contra quién van en la siguiente etapa? – Yuya rompe el silencio incómodo y veo una media sonrisa de alivio dibujada en los lábios de mi madre.
-El de Shibuya – respondo tranquilo, tratando de sonar lo más natural posible. Con eso empezamos una charla amena en la que trato de incluir a mi madre para que todo se sienta con normalidad… pero es todo tan falso.
Después de un rato de postres y televisión en el que tratamos de evitarlo el momento llegó: la hora de dormir. Una vez cerrando la puerta de la habitación nos despojamos del teatrito de “buenos amigos” y pareciera como si no existiéramos en la misma habitación… ni siquiera en el mismo universo.
-Está bien si seguimos fingiendo así frente a tu madre – Me sorprenden sus palabras tan repentinas, su tono de voz maduro.
-¿Por qué habríamos de fingir? Podríamos llevarnos bien como siempre lo hemos hecho.
-Las cosas no son iguales…
-¡Yuya! – Le interrumpo – ¡ya hice lo que me pediste! No te he molestado ni pretendido nada más contigo ¿¡qué es ahora!? – Silencio. Sólo me ignora metiéndose en su futon y lo escucho sollozar. No me gusta. Detesto que llore, desde que éramos niños siempre trataba de evitar que llorase, lo cuidaba todo el tiempo, de que no se lastimara, de que Ryo no se metiera con él, de que no perdiera sus cosas… incluso ahora quiero evitar que llore pero no sé qué hacer.
Toda esta imagen, es como un deja vu: yo sentado en el borde de mi cama viendo a Yuya envuelto en su futon llorando. Fue la primera vez que sus padres se fueron de viaje. Habían aceptado ser músicos en un crucero que sólo hacía cuatro recorridos al año, uno por cada estación, les pagarían bastante bien pues su padre es un genio con el piano y su madre tiene una de las voces más hermosas que escuchado sólo superada quizás por la de Tego; eso les bastaba y los meses que se ausentaban Yuya se quedaría en mi casa, mi madre recibiría una paga por cuidarlo y nosotros podríamos jugar todo el día. Pero la primera noche no fue fácil, él sólo tenía cuatro años y extrañaba a sus padres. Mi madre acomodó su futon nuevo con estampado de caramelos junto a mi cama y él se envolvió en la suave tela y comenzó a llorar; yo tenía tan sólo cinco años y no sabía qué hacer, sólo lo observaba, no me gustaba que llorara, entonces arrimé su pequeño cuerpo y me metí con él entre las mantas su rostro húmedos por las lágrimas y su semblante contraído por el miedo; abracé su pequeño cuerpo meciéndolo entre mis brazos y canté para él aquél arrullo que aprendí de mi padre antes de que se marchara y nos abandonara. Sus lágrimas dejaron de caer y sus sollozos se detuvieron, me sentí feliz de lo que había logrado cuando Tego se quedó dormido con un lindo semblante de ángel dibujado en su rostro; ahora que lo pienso quizás ese momento, en el que aferré mi vida a su sonrisa, haya sido el momento en que me enamoré de él. ¿Recordará él ese momento? ¿Sentirá lo que yo ahora que hemos vuelto a ese inocente pasado?
Por más que pienso mi cabeza no encuentra otra forma de detener sus lágrimas. Me introduzco en su futon que ahora es normal, color azul y sin estampado, rodeo con mis brazos su cuerpo que si bien ya no es pequeño se amolda perfecto a mí… porque no hay duda, él está hecho sólo para mí y yo para él, nadie más puede llenar mis brazos, mi mente y mi corazón, nadie, sólo mi Yuya. Comienzo a cantar
Duda un poco, sé que también lo recuerda, al final responde a mi abrazo oprimiendo su cuerpo contra el mío, esta calidez la he extrañado tanto, oler su cabello, sentir como su corazón palpita, su tic nervioso en el hombro.
-Yamapi… - habla en susurros - yo… no sé…
-Entiendo. No importa.
-No quiero que estés con Horikita…
-Oye… qué coincidencia, yo tampoco quiero estar con ella… quiero estar contigo.
-Lo sé – noto un poco de miedo en su tono de voz - pero aun creo que no está bien.
-Esperaré el tiempo que sea necesario hasta que estés listo.
-No dejes a Horikita – eso me ha sorprendido, ¿no hace un rato ha dicho que no quería que estuviera con ella? – quizás al final te enamores de ella entonces yo tendría que obligarme a la idea – pienso detenidamente sus palabras, no me parece nada razonable ni justo, pero ahora sólo quiero que él esté bien y que se sienta seguro.
-Eso haré – susurro acariciando su cabello – pero también lucharé por ti – asiente y se separa de mi abrazo. Al menos pude sentirlo, extrañaba tanto esto, le sonrío un poco y me voy a mi cama, no quiero sólo un momento, quiero que sea para siempre, pero ¿cómo?
[Nakamaru]
-Senpai… ya no… ¡ah~! Me duele.
-Tranquilo Massu, cuando truene el dolor pasará.
-Pero… senpai… no, ya no quiero.
-Masuda-kun guarde silencio por favor.
-Masu… deja a la enfermera hacer su trabajo – La miro con odio, vieja gruñona. Massu asiente y la enfermera sigue colocando el hueso de su pie hasta que se escucha un crujido, un grito de Massu y listo.
-Ponle la venda a tu amigo, debo ir con el director. – La enfermera sale, ¡pero es su trabajo! Bah, mejor así, yo me encargaré de Massu, ella lo ha tratado muy mal y ya ha sido demasiado para él soportar todo esto. Me preocupé mucho cuando tropezó en el entrenamiento, como capitán del quipo debo estar al pendiente de todos, pero no puedo evitar prestarle más atención a mi Taka. Termino de vendarle y se deja caer en la camilla.
-Eso ha sido horrible – suspira.
-Tranquilo, ya pasó – me recuesto junto a él y beso sus lábios.
-Senpai… la… enfermera… - habla sin dejar de besarme.
-Descuida, no llegará. – Sigo besándolo, sintiendo el contacto con su lengua, esto es raro, nuevo y fabuloso; nunca nos habíamos besado de esta forma. Se aferra a mi espalda acariciándola, siento la temperatura de su cuerpo aumentar bajo el mío… prudencia Yuichi, si no me detengo ahora nos meteremos en problemas.
-Te llevo a casa – bajo de la camilla y encorvo mi espalda para que Massu pueda subir; no tardo mucho en sentir sus brazos rodear mi cuello y su cuerpo acomodándose en mi espalda.
-¿Me llevarás así todo el camino? – Pregunta con burla.
-Obvio no – río – iremos en bus.
Y ahora sé porque me gusta más caminar. El viaje en bus es menos de la mitad del tiempo que nos llevamos caminando, eso es menos tiempo juntos, pero al menos lo puedo cargar a casa y eso lo compensa un poco.
Voy dando saltos con Massu sobre mi espalda, me cuesta un poco en la bajada hacia su casa pero es divertido. Vamos charlando y jugando como un par de amigos normales así que no hay inconveniente con la gente que nos mira al pasar.
-¡Takahisa! – Massu deja de reírse y gira su cabeza hacia la voz que le llama; yo giro mi cuerpo aun con Massu sobre mí y me encuentro con un señor de mirada confundida.
-Papá - ¿papá? Oh… ¡suegro a la vista!
-¿Qué haces encima de ese muchacho?
-Buenas tardes señor – me dispongo a caerle bien a mi suegro, extiendo la mano y el recibe mi saludo con desconcierto – yo sólo ayudaba a Ma… Takahisa… kun… se lastimó en el entrenamiento.
-Es mi senpai papá – dice Massu con un poco de nerviosismo en su voz.
-¿Y tiene que llevarte cargando como una chiquilla? ¡Baja de ahí! ¿Qué no eres hombre? - ¿Pero que está diciendo? Le acabo de decir que está lastimado, es obvio que Massu no puede caminar más.
-No se preocupe señor yo lo llevaré – estoy consciente de que mi actitud no es correcta pero no puedo dejar que Massu camine, si se lastima más será peor; cuando estamos por llegar a la puerta de su casa la figura de su madre se posa frente a nosotros, de inmediato fija su mirada en el tobillo vendado de su hijo y sus ojos se abren enormes.
-¡Taka-chan! ¿Qué te ha pasado? – Estoy por contestar cuando la voz de su padre tras nosotros habla.
-¡Mujer! ¡Deja de llamar a Takahisa como a un niño! Es tu culpa que sea tan torpe y débil, mira como lo trae este muchacho, a cuestas como una princesa. – Bien, eso me ha enfadado ¿cómo se atreve a hablarle así? ¿Débil? Cómo se ve que no lo ha visto correr, ni su disposición en una competencia, ¡es su hijo! Su madre no dice nada ¿no va a defenderlo? ¿Siempre deja que lo trate así? Tengo ganas de decirle algo pero al parecer Massu lo advierte y sujeta mis hombros con fuerza.
-Pasa Yuichi-kun – su madre abre la puerta y entro rápidamente a su casa dejando a Taka en el sofá.
-¡Mujer! Invita al joven a comer, va a decir que no tienes educación. – La señora Masuda asiente y me extiende la oferta, la acepto por cortesía pero la verdad no me siento cómodo. Es la primera vez que veo al padre de Massu, nunca habla de él así que para mí es un completo extraño.
La comida es rica como siempre, pero el ambiente es pesado. La mamá de Masu no charla conmigo como de costumbre, sólo se dedica a comer y a mantener el vaso de su marido lleno, Masu también come en silencio mirando en todas direcciones constantemente, el señor Masuda es el único que habla, de tonterías sobre los hombres y eso.
-¡Sírvele cerveza al joven! – Ordena a su mujer, me da coraje verla tan sumisa y obediente ante sus modales; en casa mis padres me enseñaron a pedir las cosas por favor, jamás he visto a papá tratar así a mamá.
-No gracias – replico – no bebo.
-¡Válgame! ¿Qué les pasa a los jóvenes? ¡Eres igual a este! – Señala despectivamente a Massu – ¡Parece que ya se han acabado los hombres!
Nadie más habla durante la comida. Después acompaño a Masu a su habitación mientras su padre se tira en el sofá y su madre se queda en la cocina.
-Perdón senpai – está apenado y lo entiendo – por todo eso – se deja caer en su cama poniendo las manos en su rostro.
-Descuida, pero no es tu culpa – me siento junto a él y acaricio su cabello - ¿esa es la razón Massu… - me mira sin entender – la razón por la que esconces tu homosexualidad? – Se sonroja, sé que no le gusta hablar de eso pero lo considero necesario ahora que me concierne de igual forma. Su respuesta es afirmativa y nada más; me imagino lo difícil que debió ser para él todo este tiempo, seguro su padre lo expulsa de la familia si se entera… o algo peor.
[Akanishi]
Sus manos suaves recorren mi pecho desnudo. Lame mi oreja, comienza a excitarme de nuevo pero el sonido del móvil me distrae, ya no puedo seguir evitándolo y contesto.
-Tatsuya… en casa… voy para allá… - Cuelgo.
-Tu noviecito es molesto – replica Kame mientras se enreda en las sábanas blancas de su cama.
-No lo llames así, debo irme…. – busco mi ropa que está esparcida por todo el suelo y antes de incorporarme por completo ya estoy en el piso con un Kazuya desnudo encima.
-¿Osea que te vas a perder todo esto por ir a ver a tu noviecillo sin gracia? – Me gusta su forma gatuna de insinuarse. Frota su pecho ardiente con el mío y lame mis lábios con la punta de su lengua, me encanta.
-Lo siento Kame… - lo tomo de la cintura – debo irme – le doy un último beso antes de comenzar a vestirme y salir de la casa. Es mentira, no debo encontrarme con Ueda, pero me gana el remordimiento, no debo hacerle esto, sin embargo me cuesta resistirme a Kame. Tal vez debería hablar con él y terminar, pero… me ha ayudado tanto... no quiero dejarlo así y menos por Kazuya, yo sé que está bien con sexo frecuente pero que si le propongo anunciar a todos que somos novios seguro se niega rotundamente y yo no quiero una persona así, yo quiero ser sincero con mis sentimientos… aunque lo que estoy haciendo ahora no es para nada honesto.
[Kato]
Mi cabeza no puede estar más llena de líos. Entre el beso que Ryo me dio hace una semana, el sentimiento que crece cada día, el intento absurdo por regresar a nuestra vieja rutina hay un pensamiento que cruza mi cabeza constantemente: Kusano.
Ha detenido por completo sus acosos, de hecho me evita. No sé si deba a las miradas de odio por parte de mis amigos, la casi amenaza de muerte que le hizo Ryo o porque siente que lo he descubierto. No descarto mi teoría y no creo estar muy equivocado. Kusano no sólo me odia por ser un ‘empollón’ yo sé que hay algo más. Ahora que pienso detenidamente, todas las veces que me reprochó las torturas constantes de Keii-chan quizás era porque se sentía más frustrado por el daño de su imagen frente a él. Pienso en qué haría yo. Si alguien de repente se llevara toda la atención de Ryo, aunque sé que él no corresponde mis sentimientos… aun así, aunque no estoy seguro la clase de relación que tenga Keii con Kusano, sólo sé que es su senpai de beisbol y que le llama… Hiro…
-Toc toc – la voz de Keii al abrir la puerta. – La cena Shige – entra en mi habitación y se sienta en la cama junto a mí. Me siento también… tal vez debería preguntarle también.
-Keii-chan – arquea las cejas en forma de cuestionamiento - ¿cómo te llevas con Kusano? – Sonríe un poco y acaricia el moretón que aun se percibe en mi mejilla.
-Bueno… es parte de mi vida y primo de mi novia - ¿eh? ¡Eso si me ha sorprendido!
-¿Primo? ¿¡De Yu!? – Asiente y se acomoda en la cama recargando sus manos por detrás y mirando a un punto fijo del techo.
-En realidad… conocí a Hiro primero… - regresa su cuerpo cruzando una pierna y sosteniendo su rodilla con ambas manos, parece perdido recordando algo, así que sólo lo observo y lo dejo hablar – Yu y yo… estudiamos juntos en la mismo colegio desde siempre, a veces en la misma clase, a veces no, igual ella era una niña más para mí pero en cuarto grado conocí a Hiro. Había sido transferido a nuestro colegio; lo recuerdo, era pequeño y algo regordete. Se pasaba el almuerzo viéndonos a Yuichi y a mí comer en la cafetería hasta que un día lo invité con nosotros, parecía que nadie de su curso quería hablarle y él sólo quería amigos. A la hora de la salida lo encontré solo de nuevo así que le ofrecí llevarlo a casa, yo no sabía que tenía una prima en el colegio que se supone debía cuidarlo así que todos los días lo acompañaba a casa, me desviaba del camino con los chicos un poco pero no quería que anduviera solo caminando por allí. Pasó casi un mes y parecía como tener un hermanito, lo llevaba de la mano a todas partes, compartíamos almuerzo y cuando tenía entrenamiento de beisbol me esperaba hasta que saliera. Un día me sorprendió y se hizo parte del equipo, era el más enano de todos pero bueno, estábamos en primaria. Cuando me enteré que Kashi Yu de mi clase era su prima y que se supone debería cuidarlo me enfadé y hablé con ella. Después de eso peleábamos por Hiro todo el tiempo, ella no era muy buena con él y yo lo defendía. Aunque no lo creas fueron muchos años de eso hasta que ella y yo salimos de la primaria. Bueno, aun seguía frecuentando a Hiro pero en especial a Yu, nos hicimos amigos poco a poco fue muy gracioso, supongo que ella comenzó a gustarme después de todo es guapa y tiene carácter y con Hiro en la primaria aun dejamos de pelear un poco. Nos hicimos amigos y Hiro seguía siendo como mi hermano. El entro a la secundaria y me volví su senpai de beisbol de nuevo; él notó que me gustaba su prima y supongo que la idea no le agradó entonces… comenzó a alejarse, en la preparatoria Yu y yo nos hicimos novios y dejé de saber de Hiro, se cambió a una secundaria lejana entonces no me lo encontraba ni de paso. Hasta que lo vi de nuevo en la preparatoria, pensé que las cosas podrían ser como antes pero se notaba cambiado. A veces cuando estamos en el entrenamiento o con el equipo se comporta conmigo como el hermanito que solía ser, pero lo siento dolido conmigo… no le gusta que Yu y yo estemos juntos, pero no puedo hacer nada… la amo.
Guarda silencio y suspira. Nunca me imaginé esta historia. Siempre pensé que Kusano era un compañero más de su equipo pero al parecer si hay algo.
-Keii-chan… - me mira – y si Kusano… quiero decir… pude ser que esté celoso… - me mira dudoso - de su prima… puede ser… que le gustases. – Suelta una carcajada dando manotazos en la cama y poniéndose de pie.
-¿De dónde sacas eso Shige? – Sigue riendo – lo de Jin te tiene afectado ¡vamos ya a cenar! – Me jala del brazo y sólo sonrío un poco caminando tras él.
Cualquiera en mi posición ahora quizás tendría otro humor. El lugar, el momento, la persona, todo lo que cualquier adolescente desearía. Si tan sólo sintiera por mi novia una insignificante chispa de deseo, un poco es lo que pido… pero no llega.
-Maki-chan… este… - sigue besando con desesperación mi cuello – debo ir a casa – la levanto de la cintura y la alejó de mí, me levanto del sillón y recojo mis cosas.
-Tomo-chan… - abrocha su camisa de forma coqueta - ¿quieres respetarme hasta el matrimonio? – Sonríe, se muerde el labio… salgo de su casa sin darle explicaciones. Ya darle un beso es un insulto a mis verdaderos sentimientos, no podría acostarme con ella, la sola idea… me asquea.
Pero parece que mi tormento no acaba. No sólo tengo que aguantar estar con Maki, también tengo que aguantar no estar con Tegoshi. Sus padres se fueron de nuevo ayer por la noche así que la pasará en mi casa hasta que vuelvan. Ayer, la primera noche; fue insoportable estar metidos los dos en la misma habitación; ahora al parecer le ha encontrado un uso a su futon pues no se infiltró en mi cama a la media noche como solía hacerlo. Deseaba que lo hiciera… pero no pasó. Aunque al menos ya hablamos un poco más; aparte de los ‘buenos días’ ‘buenas noches’ y ‘gracias’ hoy en el desayuno me dijo ‘pásame la mantequilla’ ¿se puede considerar un avance? Yo creo que sí… y uno muy grande, aprovechando eso hablaré esta noche con él.
Ahora estamos cenando. Es tedioso, así mi madre se dará cuenta de que algo no anda bien y paso de andarle inventando explicaciones.
-¿Contra quién van en la siguiente etapa? – Yuya rompe el silencio incómodo y veo una media sonrisa de alivio dibujada en los lábios de mi madre.
-El de Shibuya – respondo tranquilo, tratando de sonar lo más natural posible. Con eso empezamos una charla amena en la que trato de incluir a mi madre para que todo se sienta con normalidad… pero es todo tan falso.
Después de un rato de postres y televisión en el que tratamos de evitarlo el momento llegó: la hora de dormir. Una vez cerrando la puerta de la habitación nos despojamos del teatrito de “buenos amigos” y pareciera como si no existiéramos en la misma habitación… ni siquiera en el mismo universo.
-Está bien si seguimos fingiendo así frente a tu madre – Me sorprenden sus palabras tan repentinas, su tono de voz maduro.
-¿Por qué habríamos de fingir? Podríamos llevarnos bien como siempre lo hemos hecho.
-Las cosas no son iguales…
-¡Yuya! – Le interrumpo – ¡ya hice lo que me pediste! No te he molestado ni pretendido nada más contigo ¿¡qué es ahora!? – Silencio. Sólo me ignora metiéndose en su futon y lo escucho sollozar. No me gusta. Detesto que llore, desde que éramos niños siempre trataba de evitar que llorase, lo cuidaba todo el tiempo, de que no se lastimara, de que Ryo no se metiera con él, de que no perdiera sus cosas… incluso ahora quiero evitar que llore pero no sé qué hacer.
Toda esta imagen, es como un deja vu: yo sentado en el borde de mi cama viendo a Yuya envuelto en su futon llorando. Fue la primera vez que sus padres se fueron de viaje. Habían aceptado ser músicos en un crucero que sólo hacía cuatro recorridos al año, uno por cada estación, les pagarían bastante bien pues su padre es un genio con el piano y su madre tiene una de las voces más hermosas que escuchado sólo superada quizás por la de Tego; eso les bastaba y los meses que se ausentaban Yuya se quedaría en mi casa, mi madre recibiría una paga por cuidarlo y nosotros podríamos jugar todo el día. Pero la primera noche no fue fácil, él sólo tenía cuatro años y extrañaba a sus padres. Mi madre acomodó su futon nuevo con estampado de caramelos junto a mi cama y él se envolvió en la suave tela y comenzó a llorar; yo tenía tan sólo cinco años y no sabía qué hacer, sólo lo observaba, no me gustaba que llorara, entonces arrimé su pequeño cuerpo y me metí con él entre las mantas su rostro húmedos por las lágrimas y su semblante contraído por el miedo; abracé su pequeño cuerpo meciéndolo entre mis brazos y canté para él aquél arrullo que aprendí de mi padre antes de que se marchara y nos abandonara. Sus lágrimas dejaron de caer y sus sollozos se detuvieron, me sentí feliz de lo que había logrado cuando Tego se quedó dormido con un lindo semblante de ángel dibujado en su rostro; ahora que lo pienso quizás ese momento, en el que aferré mi vida a su sonrisa, haya sido el momento en que me enamoré de él. ¿Recordará él ese momento? ¿Sentirá lo que yo ahora que hemos vuelto a ese inocente pasado?
Por más que pienso mi cabeza no encuentra otra forma de detener sus lágrimas. Me introduzco en su futon que ahora es normal, color azul y sin estampado, rodeo con mis brazos su cuerpo que si bien ya no es pequeño se amolda perfecto a mí… porque no hay duda, él está hecho sólo para mí y yo para él, nadie más puede llenar mis brazos, mi mente y mi corazón, nadie, sólo mi Yuya. Comienzo a cantar
Duda un poco, sé que también lo recuerda, al final responde a mi abrazo oprimiendo su cuerpo contra el mío, esta calidez la he extrañado tanto, oler su cabello, sentir como su corazón palpita, su tic nervioso en el hombro.
-Yamapi… - habla en susurros - yo… no sé…
-Entiendo. No importa.
-No quiero que estés con Horikita…
-Oye… qué coincidencia, yo tampoco quiero estar con ella… quiero estar contigo.
-Lo sé – noto un poco de miedo en su tono de voz - pero aun creo que no está bien.
-Esperaré el tiempo que sea necesario hasta que estés listo.
-No dejes a Horikita – eso me ha sorprendido, ¿no hace un rato ha dicho que no quería que estuviera con ella? – quizás al final te enamores de ella entonces yo tendría que obligarme a la idea – pienso detenidamente sus palabras, no me parece nada razonable ni justo, pero ahora sólo quiero que él esté bien y que se sienta seguro.
-Eso haré – susurro acariciando su cabello – pero también lucharé por ti – asiente y se separa de mi abrazo. Al menos pude sentirlo, extrañaba tanto esto, le sonrío un poco y me voy a mi cama, no quiero sólo un momento, quiero que sea para siempre, pero ¿cómo?
[Nakamaru]
-Senpai… ya no… ¡ah~! Me duele.
-Tranquilo Massu, cuando truene el dolor pasará.
-Pero… senpai… no, ya no quiero.
-Masuda-kun guarde silencio por favor.
-Masu… deja a la enfermera hacer su trabajo – La miro con odio, vieja gruñona. Massu asiente y la enfermera sigue colocando el hueso de su pie hasta que se escucha un crujido, un grito de Massu y listo.
-Ponle la venda a tu amigo, debo ir con el director. – La enfermera sale, ¡pero es su trabajo! Bah, mejor así, yo me encargaré de Massu, ella lo ha tratado muy mal y ya ha sido demasiado para él soportar todo esto. Me preocupé mucho cuando tropezó en el entrenamiento, como capitán del quipo debo estar al pendiente de todos, pero no puedo evitar prestarle más atención a mi Taka. Termino de vendarle y se deja caer en la camilla.
-Eso ha sido horrible – suspira.
-Tranquilo, ya pasó – me recuesto junto a él y beso sus lábios.
-Senpai… la… enfermera… - habla sin dejar de besarme.
-Descuida, no llegará. – Sigo besándolo, sintiendo el contacto con su lengua, esto es raro, nuevo y fabuloso; nunca nos habíamos besado de esta forma. Se aferra a mi espalda acariciándola, siento la temperatura de su cuerpo aumentar bajo el mío… prudencia Yuichi, si no me detengo ahora nos meteremos en problemas.
-Te llevo a casa – bajo de la camilla y encorvo mi espalda para que Massu pueda subir; no tardo mucho en sentir sus brazos rodear mi cuello y su cuerpo acomodándose en mi espalda.
-¿Me llevarás así todo el camino? – Pregunta con burla.
-Obvio no – río – iremos en bus.
Y ahora sé porque me gusta más caminar. El viaje en bus es menos de la mitad del tiempo que nos llevamos caminando, eso es menos tiempo juntos, pero al menos lo puedo cargar a casa y eso lo compensa un poco.
Voy dando saltos con Massu sobre mi espalda, me cuesta un poco en la bajada hacia su casa pero es divertido. Vamos charlando y jugando como un par de amigos normales así que no hay inconveniente con la gente que nos mira al pasar.
-¡Takahisa! – Massu deja de reírse y gira su cabeza hacia la voz que le llama; yo giro mi cuerpo aun con Massu sobre mí y me encuentro con un señor de mirada confundida.
-Papá - ¿papá? Oh… ¡suegro a la vista!
-¿Qué haces encima de ese muchacho?
-Buenas tardes señor – me dispongo a caerle bien a mi suegro, extiendo la mano y el recibe mi saludo con desconcierto – yo sólo ayudaba a Ma… Takahisa… kun… se lastimó en el entrenamiento.
-Es mi senpai papá – dice Massu con un poco de nerviosismo en su voz.
-¿Y tiene que llevarte cargando como una chiquilla? ¡Baja de ahí! ¿Qué no eres hombre? - ¿Pero que está diciendo? Le acabo de decir que está lastimado, es obvio que Massu no puede caminar más.
-No se preocupe señor yo lo llevaré – estoy consciente de que mi actitud no es correcta pero no puedo dejar que Massu camine, si se lastima más será peor; cuando estamos por llegar a la puerta de su casa la figura de su madre se posa frente a nosotros, de inmediato fija su mirada en el tobillo vendado de su hijo y sus ojos se abren enormes.
-¡Taka-chan! ¿Qué te ha pasado? – Estoy por contestar cuando la voz de su padre tras nosotros habla.
-¡Mujer! ¡Deja de llamar a Takahisa como a un niño! Es tu culpa que sea tan torpe y débil, mira como lo trae este muchacho, a cuestas como una princesa. – Bien, eso me ha enfadado ¿cómo se atreve a hablarle así? ¿Débil? Cómo se ve que no lo ha visto correr, ni su disposición en una competencia, ¡es su hijo! Su madre no dice nada ¿no va a defenderlo? ¿Siempre deja que lo trate así? Tengo ganas de decirle algo pero al parecer Massu lo advierte y sujeta mis hombros con fuerza.
-Pasa Yuichi-kun – su madre abre la puerta y entro rápidamente a su casa dejando a Taka en el sofá.
-¡Mujer! Invita al joven a comer, va a decir que no tienes educación. – La señora Masuda asiente y me extiende la oferta, la acepto por cortesía pero la verdad no me siento cómodo. Es la primera vez que veo al padre de Massu, nunca habla de él así que para mí es un completo extraño.
La comida es rica como siempre, pero el ambiente es pesado. La mamá de Masu no charla conmigo como de costumbre, sólo se dedica a comer y a mantener el vaso de su marido lleno, Masu también come en silencio mirando en todas direcciones constantemente, el señor Masuda es el único que habla, de tonterías sobre los hombres y eso.
-¡Sírvele cerveza al joven! – Ordena a su mujer, me da coraje verla tan sumisa y obediente ante sus modales; en casa mis padres me enseñaron a pedir las cosas por favor, jamás he visto a papá tratar así a mamá.
-No gracias – replico – no bebo.
-¡Válgame! ¿Qué les pasa a los jóvenes? ¡Eres igual a este! – Señala despectivamente a Massu – ¡Parece que ya se han acabado los hombres!
Nadie más habla durante la comida. Después acompaño a Masu a su habitación mientras su padre se tira en el sofá y su madre se queda en la cocina.
-Perdón senpai – está apenado y lo entiendo – por todo eso – se deja caer en su cama poniendo las manos en su rostro.
-Descuida, pero no es tu culpa – me siento junto a él y acaricio su cabello - ¿esa es la razón Massu… - me mira sin entender – la razón por la que esconces tu homosexualidad? – Se sonroja, sé que no le gusta hablar de eso pero lo considero necesario ahora que me concierne de igual forma. Su respuesta es afirmativa y nada más; me imagino lo difícil que debió ser para él todo este tiempo, seguro su padre lo expulsa de la familia si se entera… o algo peor.
[Akanishi]
Sus manos suaves recorren mi pecho desnudo. Lame mi oreja, comienza a excitarme de nuevo pero el sonido del móvil me distrae, ya no puedo seguir evitándolo y contesto.
-Tatsuya… en casa… voy para allá… - Cuelgo.
-Tu noviecito es molesto – replica Kame mientras se enreda en las sábanas blancas de su cama.
-No lo llames así, debo irme…. – busco mi ropa que está esparcida por todo el suelo y antes de incorporarme por completo ya estoy en el piso con un Kazuya desnudo encima.
-¿Osea que te vas a perder todo esto por ir a ver a tu noviecillo sin gracia? – Me gusta su forma gatuna de insinuarse. Frota su pecho ardiente con el mío y lame mis lábios con la punta de su lengua, me encanta.
-Lo siento Kame… - lo tomo de la cintura – debo irme – le doy un último beso antes de comenzar a vestirme y salir de la casa. Es mentira, no debo encontrarme con Ueda, pero me gana el remordimiento, no debo hacerle esto, sin embargo me cuesta resistirme a Kame. Tal vez debería hablar con él y terminar, pero… me ha ayudado tanto... no quiero dejarlo así y menos por Kazuya, yo sé que está bien con sexo frecuente pero que si le propongo anunciar a todos que somos novios seguro se niega rotundamente y yo no quiero una persona así, yo quiero ser sincero con mis sentimientos… aunque lo que estoy haciendo ahora no es para nada honesto.
[Kato]
Mi cabeza no puede estar más llena de líos. Entre el beso que Ryo me dio hace una semana, el sentimiento que crece cada día, el intento absurdo por regresar a nuestra vieja rutina hay un pensamiento que cruza mi cabeza constantemente: Kusano.
Ha detenido por completo sus acosos, de hecho me evita. No sé si deba a las miradas de odio por parte de mis amigos, la casi amenaza de muerte que le hizo Ryo o porque siente que lo he descubierto. No descarto mi teoría y no creo estar muy equivocado. Kusano no sólo me odia por ser un ‘empollón’ yo sé que hay algo más. Ahora que pienso detenidamente, todas las veces que me reprochó las torturas constantes de Keii-chan quizás era porque se sentía más frustrado por el daño de su imagen frente a él. Pienso en qué haría yo. Si alguien de repente se llevara toda la atención de Ryo, aunque sé que él no corresponde mis sentimientos… aun así, aunque no estoy seguro la clase de relación que tenga Keii con Kusano, sólo sé que es su senpai de beisbol y que le llama… Hiro…
-Toc toc – la voz de Keii al abrir la puerta. – La cena Shige – entra en mi habitación y se sienta en la cama junto a mí. Me siento también… tal vez debería preguntarle también.
-Keii-chan – arquea las cejas en forma de cuestionamiento - ¿cómo te llevas con Kusano? – Sonríe un poco y acaricia el moretón que aun se percibe en mi mejilla.
-Bueno… es parte de mi vida y primo de mi novia - ¿eh? ¡Eso si me ha sorprendido!
-¿Primo? ¿¡De Yu!? – Asiente y se acomoda en la cama recargando sus manos por detrás y mirando a un punto fijo del techo.
-En realidad… conocí a Hiro primero… - regresa su cuerpo cruzando una pierna y sosteniendo su rodilla con ambas manos, parece perdido recordando algo, así que sólo lo observo y lo dejo hablar – Yu y yo… estudiamos juntos en la mismo colegio desde siempre, a veces en la misma clase, a veces no, igual ella era una niña más para mí pero en cuarto grado conocí a Hiro. Había sido transferido a nuestro colegio; lo recuerdo, era pequeño y algo regordete. Se pasaba el almuerzo viéndonos a Yuichi y a mí comer en la cafetería hasta que un día lo invité con nosotros, parecía que nadie de su curso quería hablarle y él sólo quería amigos. A la hora de la salida lo encontré solo de nuevo así que le ofrecí llevarlo a casa, yo no sabía que tenía una prima en el colegio que se supone debía cuidarlo así que todos los días lo acompañaba a casa, me desviaba del camino con los chicos un poco pero no quería que anduviera solo caminando por allí. Pasó casi un mes y parecía como tener un hermanito, lo llevaba de la mano a todas partes, compartíamos almuerzo y cuando tenía entrenamiento de beisbol me esperaba hasta que saliera. Un día me sorprendió y se hizo parte del equipo, era el más enano de todos pero bueno, estábamos en primaria. Cuando me enteré que Kashi Yu de mi clase era su prima y que se supone debería cuidarlo me enfadé y hablé con ella. Después de eso peleábamos por Hiro todo el tiempo, ella no era muy buena con él y yo lo defendía. Aunque no lo creas fueron muchos años de eso hasta que ella y yo salimos de la primaria. Bueno, aun seguía frecuentando a Hiro pero en especial a Yu, nos hicimos amigos poco a poco fue muy gracioso, supongo que ella comenzó a gustarme después de todo es guapa y tiene carácter y con Hiro en la primaria aun dejamos de pelear un poco. Nos hicimos amigos y Hiro seguía siendo como mi hermano. El entro a la secundaria y me volví su senpai de beisbol de nuevo; él notó que me gustaba su prima y supongo que la idea no le agradó entonces… comenzó a alejarse, en la preparatoria Yu y yo nos hicimos novios y dejé de saber de Hiro, se cambió a una secundaria lejana entonces no me lo encontraba ni de paso. Hasta que lo vi de nuevo en la preparatoria, pensé que las cosas podrían ser como antes pero se notaba cambiado. A veces cuando estamos en el entrenamiento o con el equipo se comporta conmigo como el hermanito que solía ser, pero lo siento dolido conmigo… no le gusta que Yu y yo estemos juntos, pero no puedo hacer nada… la amo.
Guarda silencio y suspira. Nunca me imaginé esta historia. Siempre pensé que Kusano era un compañero más de su equipo pero al parecer si hay algo.
-Keii-chan… - me mira – y si Kusano… quiero decir… pude ser que esté celoso… - me mira dudoso - de su prima… puede ser… que le gustases. – Suelta una carcajada dando manotazos en la cama y poniéndose de pie.
-¿De dónde sacas eso Shige? – Sigue riendo – lo de Jin te tiene afectado ¡vamos ya a cenar! – Me jala del brazo y sólo sonrío un poco caminando tras él.
Kashi- Mensajes : 185
Fecha de inscripción : 15/08/2011
Localización : Johnny's Land [acosando a Goseki con Koyama]
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
Yooooooooooo!!!!!
Heeeeeeeeeeee?????????????? jin.. no seras ni.comaniaco y x eso no dejas a kazu?????? hahaha Jin sexoso un dia d estos Kame va a kedar embaraz@do de ti jajajajajaa...
Massu wooo y Mafu tan kawai.. tch! el papa de massu m cae mal... buu haa y cuanxo staban n la nfermeria..jajaja yo dine.. hooow maruuu.. pillli... jajaja hnonera nada d lo k yo crei k.era.
Ryo y shigee.. y keii haaaaa!!!!
exijo contiiiiiiiiiii òó
Heeeeeeeeeeee?????????????? jin.. no seras ni.comaniaco y x eso no dejas a kazu?????? hahaha Jin sexoso un dia d estos Kame va a kedar embaraz@do de ti jajajajajaa...
Massu wooo y Mafu tan kawai.. tch! el papa de massu m cae mal... buu haa y cuanxo staban n la nfermeria..jajaja yo dine.. hooow maruuu.. pillli... jajaja hnonera nada d lo k yo crei k.era.
Ryo y shigee.. y keii haaaaa!!!!
exijo contiiiiiiiiiii òó
DANNYKAZU- Mensajes : 627
Fecha de inscripción : 29/06/2011
Edad : 37
Localización : en el caparazon de kazu
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
pd::: amoooo st fic!
DANNYKAZU- Mensajes : 627
Fecha de inscripción : 29/06/2011
Edad : 37
Localización : en el caparazon de kazu
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
no me agrado el padre de massu, osea, que homofobico mal es!!! que alguien le arregle el cerebro ese!!!! plisss!!!!
etto.. MATA YA A KAMENASHI!!!! no lo quiero cerca de jinjin!!! jinjincito es de tatchan!!!!
tego es muy tonto! , pero ese abrazo fue de lo mas cute! >.<
¬¬ si claro le dijo que salga con kashi XDDDDDD Mentiroso que es ese! jajaja ese kusano esta celoso! mi lo sabe como shige!
etto.. MATA YA A KAMENASHI!!!! no lo quiero cerca de jinjin!!! jinjincito es de tatchan!!!!
tego es muy tonto! , pero ese abrazo fue de lo mas cute! >.<
¬¬ si claro le dijo que salga con kashi XDDDDDD Mentiroso que es ese! jajaja ese kusano esta celoso! mi lo sabe como shige!
Princesa Saranini de Ueda- Mensajes : 2587
Fecha de inscripción : 07/01/2011
Edad : 35
Localización : en UEPOPUTOPIA : soy la princesa hada que sirve al principito Ueda
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
kyaaaaa faaaa!!! esta genialosooooooooojala ryo kiera estar a lado de shige!.. eske asdasd >0<!...
y tego sigue esxasperandome!!ke estes con ese tipo!! asdasd
conti faaaa~
y tego sigue esxasperandome!!ke estes con ese tipo!! asdasd
conti faaaa~
Usagi- Mensajes : 90
Fecha de inscripción : 13/09/2011
Edad : 34
Localización : con Teshi a mi lado♥ *w*
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
me cayo mal el padre de massu~ ;3;!
es un machista homofobico >w<!
pobre del buta~
con un padre asi, quien se anima
a decir que es homo~;w;!
Quiero que el TegoPi este junto de una vez~ >33>!!
es un machista homofobico >w<!
pobre del buta~
con un padre asi, quien se anima
a decir que es homo~;w;!
Quiero que el TegoPi este junto de una vez~ >33>!!
Arioka_shinku- Mensajes : 39
Fecha de inscripción : 26/12/2011
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
-¿Por qué está tan llena la biblioteca? - se queja por sexta o séptima vez, no lo sé, ya he perdido la cuenta, sólo sigo llenando los estantes con libros que a la vez me son arrebatados casi de las manos por otro estudiante apurado. Andan al acecho como pirañas hambrientas, si sacaran buenas notas a lo largo del semestre no tendrían que llegar a esto.
-Exámenes – le respondo torciendo los lábios. Tenemos exámenes todo el tiempo, pero estos son importantes porque de ellos dependen las vacaciones de navidad. Seis meses se han pasado muy rápido. El viento de invierno es frío a diferencia del cálido julio que me trajo a esta ciudad.
Tal vez nosotros deberíamos estudiar también, pero ya hemos salvado el semestre así que no dependemos mucho de estos exámenes, además Ryo le ha sacado provecho a la biblioteca y su imagen de “chico rudo” no se ve afectada.
-Nishikido-kun – es Ohkura de segundo año - ¿lo tienes? – le dice en susurros Ryo checa su lista ¡va de nuevo!
-Células – le extiende el libro y recibe la paga, Ohkura se aleja con discreción mientras miro mal a Ryo. ¡Ese es su gran negocio! Los libros escasean, todos quieren estudiar, así que Ryo los aparta y recibe una pequeña paga a cambio.
-No, no, Shige – replica golpeando su bolsillo repleto de monedas – nada de quejas, prometo llevarte a comer con las ganancias. – Sonríe ampliamente y yo sólo me alejo de él y sus malas mañas, aunque no puedo evitar pensar que es lindo. Estos días suelo ser apático con él pero se está esforzando para que las cosas vuelvan a hacer como antes, me gustaría poder ser como él y hacer lo mismo, pero no puedo, para mí es diferente ahora, por más que trate no puedo volver al pasado que éramos. Lo noto en él, sé que lo disimula o finge que no le importa, pero he notado que mi cercanía le incomoda, me frustra.
-¡Shige! – Llega arrastrando su carrito de nuevo repleto de libros.
-Ya voy – lo alcanzo y ayudo a seguir acomodando.
[Kamenashi]
Ahí está Ueda, sonriéndole a Jin de esa forma descarada ¿no le da pena? Ponerse en ridículo por un romance estúpido, si le diera a Jin todo lo que necesita él no me buscaría, pero no puede evitarlo, Jin es mío de eso no hay duda, hasta que no esté completamente con Ueda no dejará de pertenecerme y es obvio que no lo hará, no tiene las agallas suficientes porque sabe que me ama. ¿Qué se siente Ueda? Estar con el hombre que hace no más de diez minutos me acariciaba con deseo en una de las casetas del baño. “¿Qué se siente Kazuya? Qué ese hombre que te posee cuando quiere no te sonría de la misma forma, ni tome tu mano ni acaricie tu cabeza, que su amor no sea más que un rato de sexo a veces en lugares sucios y sólo cuando se le dé la gana ¿se siente bien?”
-No, no se siente bien…
[Koyama]
-¡Llegamos tarde Yuichi! ¡Seguro ya no encontramos nada! – le reprocho mientras recorremos a empujones la biblioteca, cada fin de semestre es lo mismo, pero bueno, somos hombres.
-Tranquilo, ya lo arreglé – buscamos no se qué entre todos los pasillos hasta que se detiene. - ¡Ryo! ¿Lo tienes?
-¿Qué piensas? – Abre una puertilla baja del carrito que sostiene y saca los volúmenes de ‘la guerra del opio’ que necesitamos. Yuichi lo toma y me codea.
-Págale – lo miro con reproche pero al parecer no tengo otra opción.
-Bribón – le digo a Ryo mirando mal a Shige que se esconde tras él.
-A mí no me mires yo sólo voy a comer.
-No te quejes Keii-chan~ te he salvado el trasero.
-Sí, sí – le pago - ¿puedes conseguirnos libros de física para mañana? – Se queda pensativo mientras cuenta el dinero.
-Será difícil… pero trataré Keiichiro, por nuestra amistad.
-Claro, claro. –
Ahora sí, es momento de estudiar. Buscamos una mesa libre donde comenzar. Paseando por la sala de la biblioteca hasta que mi mirada se cruza con la de Hiro. Él se voltea de inmediato al verme y vuelve a su libro. He pensado lo que dijo Shige, no quiero creerlo… pero… ¿y si es verdad? Todo encaja, pero no es algo que pase a menudo, no es tan fácil decir ‘le gusto al primo de mi novia’, eso no pasa. Cuando nos acomodamos pienso, ¿Quién mejor que mi gran amigo Nakamaru para un consejo?
-Yu-chan…
[Nakamaru]
-¿Qué pasa?
-¿Te pregunto algo?
-Pregunta – ¡Ya era hora! Que de hace un par de días anda rarito y pensé que nunca me contaría.
-Alguna vez… has sospechado… que un amigo tuyo, alguien digamos cercano,
gusta de ti – lo último lo dice bajito.
-¿A quién le gustas? – Jojojo… esto es un gran paquete~ -… espera… ¿te diste cuenta solo?
-¡Idiota! – Se ruboriza – claro… obvio noto esas cosas – ¿no me digas? Porque yo no me esforcé nada por ocultar que te amaba, ¿cuántos años fueron? ¿4? ¿5? – sólo que…
-¿Quién? – Le interrogo, pero no le agrada mucho mi pregunta, supongo que de alguna forma le avergüenza – no me digas si no quieres, pero dime entonces ¿qué te preocupa?
-Todo… - silencio. No lo presionaré a hablar del tema entonces, pero me parece extraño, estoy seguro que él no se dio cuenta solo y eso es lo que le frustra.
*
*
Ahora quisiera yo hablar con Keii-chan. Hace un rato que fui a casa de Massu a dejarlo me he encontrado de nuevo con su padre, esta situación me tiene un poco confundido. Pero sólo hay una persona en la que confío tanto como en Keii-chan, aunque bueno, a veces no le cuento todo, me da un poco de miedo, pero me conoce a la perfección, pero tal vez ahora es cuando debería hablar con ella.
-Mamá… - entro a la cocina donde ella está terminando de decorar un pastel.
-Okaeri Yu-chan – coloca la última mora y sonríe orgullosa – quiero que entregues esto en la casa de Nagano-san.
-Mamá… quiero hablar – deja lo que está haciendo y me mira preocupada – descuida, no me pasa nada –aunque al parecer, después de todo no puedo decirle – es… ¡Keii-chan! ¡Sí! Tiene conflictos porque cree que uno de sus amigos está enamorado de él.
-¡Oh! ¿Ya se dio cuenta que te gusta? -¿¡QUÉ!? Mis ojos se abren como platos ¿¡cómo rayos sabe eso!?
-¿Có – có có… q-qué-qué…? –Sin palabras.
-Hablas dormido Yu-chan, aparte soy tu madre, que no se te olvide. Entonces… ¿ya se dio cuenta? ¿Qué te dijo?
-No… ¿qué? ¡No! A mí no me gusta Keii-chan… es decir, ya no me gusta Keii-chan – me mira dudosa - ¡es cierto!
-Te creo, te creo… pero fueron tantos años… -¡bruja!
-Sabes que Keii tiene novia – suspiro – pero ese ya no es el punto… ¿a ti te… enfadó? Que me gustara un chico...
-Claro que no hijo, tu puedes tomar las decisiones que quieras…
-¿Y a papá? ¿Crees que le moleste?
-Bueno… quizás primero vaya a golpear a tu tío Hideaki por creer que te ha influenciado – reímos, es cierto, el tío Hideaki, el hermano menor de papá, es gay… o algo así. – Mira Yu-chan… tu padre lo aceptaría, eres su hijo. Hace algunos años, cuando se enteró de que su hermanito salía con un tipo trató de regresarlo al “buen camino” lo llevaba a las juergas de la universidad a que conociera chicas. Siempre ha sido muy mono, incluso mis amigas babeaban por él aunque fuese menor, siempe ha sido muy guapo… pero nunca funcionó, él se aferró a su amado Tsubasa y a tu padre no le quedó más que aceptarlo, ama a su hermano más que lo que le puede afectar cualquier perjuicio y lo mismo pasa contigo, no te preocupes. – Esas palabras me provocan una inmensa felicidad, que mis padres me apoyan sobre todas las cosas y que siempre estarán allí para mí… y para Massu.
[Kato]
Después de la locura en la biblioteca salí a toda velocidad del colegio, ni siquiera vi si Ryo ya se había ido o no. Tenía que pasar a comprar algo importante: un ramo de frescos lirios. Aunque cuando llegué el lugar estaba cubierto de hermosas flores: claveles, azucenas y demás formaban un paisaje realmente hermoso. Sonrío al pensar que a pesar de que estuve lejos todos estos años mis padres no fueron abandonados. Un día como hoy, hace once años, ellos dejaron este mundo. Seguro ahora están en un lugar mejor, no hay duda, no los recuerdo, pero tengo mucho que agradecerles. Acomodo las flores en el florero libre que me ha dejado el señor Koyama y después de orar me quedo sentado frente a su tumba charlando un poco. Platico sobre la escuela, mis amigos y un poco sobre Ryo. De cierta forma me avergüenza, pero me hace sentir un poco mejor sacarlo aunque esté hablando prácticamente solo.
Contemplo las flores que se mueven un poco con el viento, tomo uno de los blancos lirios, haré una parada más antes de volver a casa.
Recuerdo el camino y cuando estoy por llegar me percato de que ella tampoco está sola. Hace dos meses de la muerte de la abuela de Ryo y él está aquí, hincado frente a su tumba acomodando un racimo de gladiolas amarillas.
-Hola… - me acerco acomodando la flor en el centro de la tumba.
-Gracias – sonríe, provoca que mi corazón de un vuelco. No puedo permitirme esto de nuevo, se supone que estamos tratando de volver a lo que éramos.
-Creo que me voy – es mejor para los dos que lo deje solo.
-No – dice de repente – quédate conmigo. – Me quedo junto a él en silencio anticipando el momento en el que me derretiré. Pasa un rato en el que consigo calmar mis latidos un poco.
-Ryo – el cielo se obscurece de repente – es mejor que nos vayamos – y justo al decir lo último empieza a gotear y después…
-¡Corre! – Como una ráfaga; las gotas no me dejan ver por dónde voy corriendo, sólo soy guiado por la mano de Ryo que sostiene la mía con fuerza mientras me arrastra a un lugar incierto. No puedo evitar sentirme embelesado por este tacto; todo mi cuerpo ha sucumbido ante la fría tormenta pero mi mano se siente cálida en contacto con la suya. Entonces reconozco las paredes grises del colegio, eso indica que aún queda un tramo para llegar a casa.
-¡Entremos! – Me lleva a la parte trasera donde la reja es más baja y la brinca sin problemas. Su mano deja de sostener la mía así que el frío tacto del tubo en que me apoyo me hace perder el equilibrio y caigo al otro lado sobre un charco de frío lodo aun sin poder ver nada. – Ten cuidado – no puedo ver el rostro de Ryo entre la lluvia, pero escucho su voz acercarse y siento su mano levantar mi cuerpo y luego sosteniendo la mía y de un tirón llevándome a un lugar seco.
Por fin podemos respirar. Entramos con cuidado al gimnasio y nos acurrucamos bajo las gradas. Estamos empapados y hace un frío terrible, seguro me dará un resfriado. Ryo comienza a reírse de repente y yo le sigo.
-¡Qué desastre! – Se sigue riendo. Su mano no deja de sostener la mía con fuerza mientras se deja caer en el suelo. – Shige… no me siento bien. - Lo miro y su respiración es muy agitada. – Shige tengo frío – se acurruca, toma mi mano y la abraza con las suyas poniéndola junto a su mejilla, se siente muy caliente, sus párpados comienzan a cerrarse, me emociono un poco pero ahora estoy preocupado.
-Ryo aguanta – toco su frente con mi mano libre, su temperatura está subiendo – cuando deje de llover te llevo a casa, aguanta.
-Tengo frío… - ¿qué hago? Me quito el saco del uniforme pero está tan mojado con él, esto no servirá.
-Perdóname Ryo – me recuesto junto a él y le abrazo, cubriendo su cuerpo con el mío, esperando que aunque también esté frío pueda darle un poco de calor. Debe ser incómodo para él que estemos en esta situación, ha estadio evitando el contacto todo este tiempo, pero no hay otra opción. Su respiración es muy caliente y a pesar de eso sus manos no dejan de estar heladas.
-Shige… - susurra – gracias por estar siempre conmigo.
-Siempre estaré contigo Ryo, eres mi mejor amigo – y te amo, se que también lo sabes, pero no tengo el valor de decirlo ahora y sé que no te lo diré nunca. Tanteo mi mochila buscando mi móvil que al parecer por la funda está seco, debería llamar a alguien que venga por nosotros.
-Gracias… - se apoya en mi pecho, creo que se está quedando dormido, bajo un poco mi rostro para confirmarlo y me encuentro sorpresivamente con sus ojos, observándome… y después sus lábios sobre los míos. Se abraza más contra mi pecho que está por explotar. Sus lábios están muy calientes y se mueven lentos y prolongado contra los míos, abre lentamente su boca dejando un suspiro dentro de la mía… y se queda dormido.
[Yamashita]
La lluvia no para y Tegoshi no llega. Llevo rato mirando por la ventana pero la lluvia es muy espesa. De repente unas luces de auto se distinguen entre la penumbra, se estaciona frente a mi casa y alguien baja. Después se escucha que tocan el timbre con fuerza y bajo a toda velocidad pero mi madre ya está abriendo.
-¡Yuya! Menos mal que llegaste. – Me siento mucho mejor al verlo atravesar la puerta. Está sólo un poco mojado.
-Lo siento, me trajo el padre de Massu - ¿¡Massu!? ¿¡De nuevo ese cachetón!?
-¿Acaso estabas en su casa? – Le cuestiono, parece que estoy enfadado, pero no estoy enfadado… bien, si estoy enfadado. Tego asiente, sabe que me he cabreado.
-Sube a cambiarte Yuya, estás un poco mojado – bien madre.
Y dicho. Subió a mi cuarto con algo de miedo, cuando cerré la puerta sólo sonrió un poco y se apresuró a excusarse.
-Estudiamos – dijo, y le creo, no es que desconfíe de lo que hicieron, es sólo que me da… ¡celos! Él y yo no podemos ser nada más que ‘amigos’ entonces no quiero que confíe en nadie más que en mí. Sí, soy egoísta, creo que es lo menos que merezco, he dado mucho por él todos estos años, quiero al menos seguir siendo alguien importante en su vida.
-Cámbiate ya, no quiero que te resfríes. – Sermón tragado. Ahora sí ya no puedo reprocharle nada, yo tengo a Maki después de todo.
-Tomo… - susurra - ¿tienes celos? ¿Aun te dan celos? – Me acerco a él mirándolo incrédulo.
-¿Cómo no voy a estar celoso? Sabes lo mucho que te amo Yuya – me ha salido. Es la primera vez que se lo digo y me ha salido sin pensar; prometí que no se lo diría para no asustarlo pero ha salido sólo. Sus ojos comienzan a tornarse carmín avecinando lágrimas. No por favor, que no llore, no más llanto, detesto que lo haga.
Me acerco y lo abrazo justo cuando comienzan sus sollozos. Mis dedos acarician sus cabellos lacios mientras se aferra a mi cuerpo. Entonces busca mis lábios, sí, él, el que había dicho que ya no más, que olvidara todo, que me quedara con mi novia. Él, está ahora rogándome que corresponda su beso frotando sus lábios con vehemencia sobre los míos.
Terminamos en la cama. Ahora no, no quiero detenerme, no por él, ahora pensaré en mí, sólo si él me pide alejarme lo haré. Pero parece que él tampoco quiere y tiene prisa; tantos años, tantos sentimientos, tanto deseo, tanto daño, tal vez esto es a lo único que podamos llegar, tal vez esto es lo que necesitamos para decir adiós por fin a este amor que no nos deja.
-Yuya, no me voy a detener – desabotono su camisa, todo bien… hasta ahora, no se resiste. De repente un escalofrío recorre todo mi cuerpo: su mano… ha comenzado a tocar mi miembro, a oprimirlo con fuerza, me estoy excitando, ¿eso es un ‘sí’? ¿Eso es un ‘no te detengas’? Y no lo haré. Estoy empezando a excitarme demasiado, quiero probar su piel, esa epidermis que he estado fuera de mi alcance ahora sucumbe ante mis caricias, tiembla, se emociona. Logro por fin quitarle la camisa, el pantalón es cosa fácil: un botón, la bragueta y la valla que forma su ropa interior entre su suculenta masculinidad y yo. Estoy nervioso, lo acepto; no es que yo sea un experto en esto, pero no es sólo eso, es la sensación de hormigueo por todo mi cuerpo estar aquí… con Yuya, mi Yuya, la única persona que he amado desde que tenía cuatro años. Ahora soy yo quien juguetea con su pene. Mi lengua recorre sus pequeños y marrones pezones. Comienza a gemir, con esa voz angelical que amo tanto, es como una melodía de placer que se pierde en mis sentidos haciéndome desear más: y lo consigo. Lo he desnudado por completo en un arranque de lujuria, ya no puedo más con esto, verlo así, contemplar su desnudes, mostrando esa nueva faceta de sensualidad y ternura. Pruebo nuevamente sus lábios, jugosos, su cuello, sus hombros. Ahora es él quien desabrocha mi pantalón, le ayudo a retirarlo, desabotona mi camisa pero la ansiedad ya no me da tiempo de arrancarla por completo, mi miembro necesita ese siguiente paso.
Busco su entrada con mis dedos, gime, jadea, incluso babea ante la excitación. Se siente cálido, me hace temblar. Mi mente se llena de suculentos pensamientos al imaginar lo que se sentirá que mi miembro esté dentro de esta estrecha cavidad. Empieza a humedecerse, incluso se siente más flexible ¿es así como debo hacerlo? Para no lastimarlo, porque no quiero que llore. Acaricio su mejilla y él asiente mordiéndose el labio. Entonces comienzo. Al primer contacto siento como si algo se abriera en mi interior, un placer infinito, aunque es sólo contacto, no sé si sea por morbo o por deseo, ya no sé qué pasa por mi mente. Comienzo a adentrarme, despacio, jadeo, siento, exploro; es caliente, húmedo, profundo, estrecho. Quiero probar más, quiero tener más, entrar completamente, que me reviente los tímpanos con su gimoteo sensual. Tantos pensamientos que despiertan mis ganas de no terminar nunca. Por fin lo logro. Yuya aprieta las sábanas con fuerza mientras se retuerce sobre la cama. Comienzo a moverme, primero despacio, mis piernas se han entumido por lo que ahora es más difícil, pero lo logró. A un ritmo, luego más y más rápido. Siento como un terremoto y en mi estómago; mi respiración va y viene en una y otra exhalación. Mis manos están sudando tanto que las caderas de Tego se resbalan lo cual hace la penetración más difícil. Me sostengo un poco de su miembro, jalándolo un poco cruel pero provocándole gemidos de incontenible placer. Humedad, en mi mano, en su pierna, sobre las sábanas. El tiempo se detiene cuando derramo mi semen en su interior y él con un último grito se corre en mi mano.
Salgo de su interior casi de inmediato, cuando caigo en cuenta de todo lo que ha pasado. Me dejo caer en el otro extremo de la cama. Lo hicimos, eso que tratamos de evitar tantas veces salió por sí mismo, como si lo necesitáramos.
-Abrázame – solloza él. Me acerco lentamente y tomo su cuerpo entre mis brazos. - ¿Será lo último verdad? – Sigue llorando. No Yuya, no quiero que sea lo último, no quiero que sea el final.
-Lo será – susurro contra sus lábios y después le beso tiernamente. – Si tu quieres lo será.
-Exámenes – le respondo torciendo los lábios. Tenemos exámenes todo el tiempo, pero estos son importantes porque de ellos dependen las vacaciones de navidad. Seis meses se han pasado muy rápido. El viento de invierno es frío a diferencia del cálido julio que me trajo a esta ciudad.
Tal vez nosotros deberíamos estudiar también, pero ya hemos salvado el semestre así que no dependemos mucho de estos exámenes, además Ryo le ha sacado provecho a la biblioteca y su imagen de “chico rudo” no se ve afectada.
-Nishikido-kun – es Ohkura de segundo año - ¿lo tienes? – le dice en susurros Ryo checa su lista ¡va de nuevo!
-Células – le extiende el libro y recibe la paga, Ohkura se aleja con discreción mientras miro mal a Ryo. ¡Ese es su gran negocio! Los libros escasean, todos quieren estudiar, así que Ryo los aparta y recibe una pequeña paga a cambio.
-No, no, Shige – replica golpeando su bolsillo repleto de monedas – nada de quejas, prometo llevarte a comer con las ganancias. – Sonríe ampliamente y yo sólo me alejo de él y sus malas mañas, aunque no puedo evitar pensar que es lindo. Estos días suelo ser apático con él pero se está esforzando para que las cosas vuelvan a hacer como antes, me gustaría poder ser como él y hacer lo mismo, pero no puedo, para mí es diferente ahora, por más que trate no puedo volver al pasado que éramos. Lo noto en él, sé que lo disimula o finge que no le importa, pero he notado que mi cercanía le incomoda, me frustra.
-¡Shige! – Llega arrastrando su carrito de nuevo repleto de libros.
-Ya voy – lo alcanzo y ayudo a seguir acomodando.
[Kamenashi]
Ahí está Ueda, sonriéndole a Jin de esa forma descarada ¿no le da pena? Ponerse en ridículo por un romance estúpido, si le diera a Jin todo lo que necesita él no me buscaría, pero no puede evitarlo, Jin es mío de eso no hay duda, hasta que no esté completamente con Ueda no dejará de pertenecerme y es obvio que no lo hará, no tiene las agallas suficientes porque sabe que me ama. ¿Qué se siente Ueda? Estar con el hombre que hace no más de diez minutos me acariciaba con deseo en una de las casetas del baño. “¿Qué se siente Kazuya? Qué ese hombre que te posee cuando quiere no te sonría de la misma forma, ni tome tu mano ni acaricie tu cabeza, que su amor no sea más que un rato de sexo a veces en lugares sucios y sólo cuando se le dé la gana ¿se siente bien?”
-No, no se siente bien…
[Koyama]
-¡Llegamos tarde Yuichi! ¡Seguro ya no encontramos nada! – le reprocho mientras recorremos a empujones la biblioteca, cada fin de semestre es lo mismo, pero bueno, somos hombres.
-Tranquilo, ya lo arreglé – buscamos no se qué entre todos los pasillos hasta que se detiene. - ¡Ryo! ¿Lo tienes?
-¿Qué piensas? – Abre una puertilla baja del carrito que sostiene y saca los volúmenes de ‘la guerra del opio’ que necesitamos. Yuichi lo toma y me codea.
-Págale – lo miro con reproche pero al parecer no tengo otra opción.
-Bribón – le digo a Ryo mirando mal a Shige que se esconde tras él.
-A mí no me mires yo sólo voy a comer.
-No te quejes Keii-chan~ te he salvado el trasero.
-Sí, sí – le pago - ¿puedes conseguirnos libros de física para mañana? – Se queda pensativo mientras cuenta el dinero.
-Será difícil… pero trataré Keiichiro, por nuestra amistad.
-Claro, claro. –
Ahora sí, es momento de estudiar. Buscamos una mesa libre donde comenzar. Paseando por la sala de la biblioteca hasta que mi mirada se cruza con la de Hiro. Él se voltea de inmediato al verme y vuelve a su libro. He pensado lo que dijo Shige, no quiero creerlo… pero… ¿y si es verdad? Todo encaja, pero no es algo que pase a menudo, no es tan fácil decir ‘le gusto al primo de mi novia’, eso no pasa. Cuando nos acomodamos pienso, ¿Quién mejor que mi gran amigo Nakamaru para un consejo?
-Yu-chan…
[Nakamaru]
-¿Qué pasa?
-¿Te pregunto algo?
-Pregunta – ¡Ya era hora! Que de hace un par de días anda rarito y pensé que nunca me contaría.
-Alguna vez… has sospechado… que un amigo tuyo, alguien digamos cercano,
gusta de ti – lo último lo dice bajito.
-¿A quién le gustas? – Jojojo… esto es un gran paquete~ -… espera… ¿te diste cuenta solo?
-¡Idiota! – Se ruboriza – claro… obvio noto esas cosas – ¿no me digas? Porque yo no me esforcé nada por ocultar que te amaba, ¿cuántos años fueron? ¿4? ¿5? – sólo que…
-¿Quién? – Le interrogo, pero no le agrada mucho mi pregunta, supongo que de alguna forma le avergüenza – no me digas si no quieres, pero dime entonces ¿qué te preocupa?
-Todo… - silencio. No lo presionaré a hablar del tema entonces, pero me parece extraño, estoy seguro que él no se dio cuenta solo y eso es lo que le frustra.
*
*
Ahora quisiera yo hablar con Keii-chan. Hace un rato que fui a casa de Massu a dejarlo me he encontrado de nuevo con su padre, esta situación me tiene un poco confundido. Pero sólo hay una persona en la que confío tanto como en Keii-chan, aunque bueno, a veces no le cuento todo, me da un poco de miedo, pero me conoce a la perfección, pero tal vez ahora es cuando debería hablar con ella.
-Mamá… - entro a la cocina donde ella está terminando de decorar un pastel.
-Okaeri Yu-chan – coloca la última mora y sonríe orgullosa – quiero que entregues esto en la casa de Nagano-san.
-Mamá… quiero hablar – deja lo que está haciendo y me mira preocupada – descuida, no me pasa nada –aunque al parecer, después de todo no puedo decirle – es… ¡Keii-chan! ¡Sí! Tiene conflictos porque cree que uno de sus amigos está enamorado de él.
-¡Oh! ¿Ya se dio cuenta que te gusta? -¿¡QUÉ!? Mis ojos se abren como platos ¿¡cómo rayos sabe eso!?
-¿Có – có có… q-qué-qué…? –Sin palabras.
-Hablas dormido Yu-chan, aparte soy tu madre, que no se te olvide. Entonces… ¿ya se dio cuenta? ¿Qué te dijo?
-No… ¿qué? ¡No! A mí no me gusta Keii-chan… es decir, ya no me gusta Keii-chan – me mira dudosa - ¡es cierto!
-Te creo, te creo… pero fueron tantos años… -¡bruja!
-Sabes que Keii tiene novia – suspiro – pero ese ya no es el punto… ¿a ti te… enfadó? Que me gustara un chico...
-Claro que no hijo, tu puedes tomar las decisiones que quieras…
-¿Y a papá? ¿Crees que le moleste?
-Bueno… quizás primero vaya a golpear a tu tío Hideaki por creer que te ha influenciado – reímos, es cierto, el tío Hideaki, el hermano menor de papá, es gay… o algo así. – Mira Yu-chan… tu padre lo aceptaría, eres su hijo. Hace algunos años, cuando se enteró de que su hermanito salía con un tipo trató de regresarlo al “buen camino” lo llevaba a las juergas de la universidad a que conociera chicas. Siempre ha sido muy mono, incluso mis amigas babeaban por él aunque fuese menor, siempe ha sido muy guapo… pero nunca funcionó, él se aferró a su amado Tsubasa y a tu padre no le quedó más que aceptarlo, ama a su hermano más que lo que le puede afectar cualquier perjuicio y lo mismo pasa contigo, no te preocupes. – Esas palabras me provocan una inmensa felicidad, que mis padres me apoyan sobre todas las cosas y que siempre estarán allí para mí… y para Massu.
[Kato]
Después de la locura en la biblioteca salí a toda velocidad del colegio, ni siquiera vi si Ryo ya se había ido o no. Tenía que pasar a comprar algo importante: un ramo de frescos lirios. Aunque cuando llegué el lugar estaba cubierto de hermosas flores: claveles, azucenas y demás formaban un paisaje realmente hermoso. Sonrío al pensar que a pesar de que estuve lejos todos estos años mis padres no fueron abandonados. Un día como hoy, hace once años, ellos dejaron este mundo. Seguro ahora están en un lugar mejor, no hay duda, no los recuerdo, pero tengo mucho que agradecerles. Acomodo las flores en el florero libre que me ha dejado el señor Koyama y después de orar me quedo sentado frente a su tumba charlando un poco. Platico sobre la escuela, mis amigos y un poco sobre Ryo. De cierta forma me avergüenza, pero me hace sentir un poco mejor sacarlo aunque esté hablando prácticamente solo.
Contemplo las flores que se mueven un poco con el viento, tomo uno de los blancos lirios, haré una parada más antes de volver a casa.
Recuerdo el camino y cuando estoy por llegar me percato de que ella tampoco está sola. Hace dos meses de la muerte de la abuela de Ryo y él está aquí, hincado frente a su tumba acomodando un racimo de gladiolas amarillas.
-Hola… - me acerco acomodando la flor en el centro de la tumba.
-Gracias – sonríe, provoca que mi corazón de un vuelco. No puedo permitirme esto de nuevo, se supone que estamos tratando de volver a lo que éramos.
-Creo que me voy – es mejor para los dos que lo deje solo.
-No – dice de repente – quédate conmigo. – Me quedo junto a él en silencio anticipando el momento en el que me derretiré. Pasa un rato en el que consigo calmar mis latidos un poco.
-Ryo – el cielo se obscurece de repente – es mejor que nos vayamos – y justo al decir lo último empieza a gotear y después…
-¡Corre! – Como una ráfaga; las gotas no me dejan ver por dónde voy corriendo, sólo soy guiado por la mano de Ryo que sostiene la mía con fuerza mientras me arrastra a un lugar incierto. No puedo evitar sentirme embelesado por este tacto; todo mi cuerpo ha sucumbido ante la fría tormenta pero mi mano se siente cálida en contacto con la suya. Entonces reconozco las paredes grises del colegio, eso indica que aún queda un tramo para llegar a casa.
-¡Entremos! – Me lleva a la parte trasera donde la reja es más baja y la brinca sin problemas. Su mano deja de sostener la mía así que el frío tacto del tubo en que me apoyo me hace perder el equilibrio y caigo al otro lado sobre un charco de frío lodo aun sin poder ver nada. – Ten cuidado – no puedo ver el rostro de Ryo entre la lluvia, pero escucho su voz acercarse y siento su mano levantar mi cuerpo y luego sosteniendo la mía y de un tirón llevándome a un lugar seco.
Por fin podemos respirar. Entramos con cuidado al gimnasio y nos acurrucamos bajo las gradas. Estamos empapados y hace un frío terrible, seguro me dará un resfriado. Ryo comienza a reírse de repente y yo le sigo.
-¡Qué desastre! – Se sigue riendo. Su mano no deja de sostener la mía con fuerza mientras se deja caer en el suelo. – Shige… no me siento bien. - Lo miro y su respiración es muy agitada. – Shige tengo frío – se acurruca, toma mi mano y la abraza con las suyas poniéndola junto a su mejilla, se siente muy caliente, sus párpados comienzan a cerrarse, me emociono un poco pero ahora estoy preocupado.
-Ryo aguanta – toco su frente con mi mano libre, su temperatura está subiendo – cuando deje de llover te llevo a casa, aguanta.
-Tengo frío… - ¿qué hago? Me quito el saco del uniforme pero está tan mojado con él, esto no servirá.
-Perdóname Ryo – me recuesto junto a él y le abrazo, cubriendo su cuerpo con el mío, esperando que aunque también esté frío pueda darle un poco de calor. Debe ser incómodo para él que estemos en esta situación, ha estadio evitando el contacto todo este tiempo, pero no hay otra opción. Su respiración es muy caliente y a pesar de eso sus manos no dejan de estar heladas.
-Shige… - susurra – gracias por estar siempre conmigo.
-Siempre estaré contigo Ryo, eres mi mejor amigo – y te amo, se que también lo sabes, pero no tengo el valor de decirlo ahora y sé que no te lo diré nunca. Tanteo mi mochila buscando mi móvil que al parecer por la funda está seco, debería llamar a alguien que venga por nosotros.
-Gracias… - se apoya en mi pecho, creo que se está quedando dormido, bajo un poco mi rostro para confirmarlo y me encuentro sorpresivamente con sus ojos, observándome… y después sus lábios sobre los míos. Se abraza más contra mi pecho que está por explotar. Sus lábios están muy calientes y se mueven lentos y prolongado contra los míos, abre lentamente su boca dejando un suspiro dentro de la mía… y se queda dormido.
[Yamashita]
La lluvia no para y Tegoshi no llega. Llevo rato mirando por la ventana pero la lluvia es muy espesa. De repente unas luces de auto se distinguen entre la penumbra, se estaciona frente a mi casa y alguien baja. Después se escucha que tocan el timbre con fuerza y bajo a toda velocidad pero mi madre ya está abriendo.
-¡Yuya! Menos mal que llegaste. – Me siento mucho mejor al verlo atravesar la puerta. Está sólo un poco mojado.
-Lo siento, me trajo el padre de Massu - ¿¡Massu!? ¿¡De nuevo ese cachetón!?
-¿Acaso estabas en su casa? – Le cuestiono, parece que estoy enfadado, pero no estoy enfadado… bien, si estoy enfadado. Tego asiente, sabe que me he cabreado.
-Sube a cambiarte Yuya, estás un poco mojado – bien madre.
Y dicho. Subió a mi cuarto con algo de miedo, cuando cerré la puerta sólo sonrió un poco y se apresuró a excusarse.
-Estudiamos – dijo, y le creo, no es que desconfíe de lo que hicieron, es sólo que me da… ¡celos! Él y yo no podemos ser nada más que ‘amigos’ entonces no quiero que confíe en nadie más que en mí. Sí, soy egoísta, creo que es lo menos que merezco, he dado mucho por él todos estos años, quiero al menos seguir siendo alguien importante en su vida.
-Cámbiate ya, no quiero que te resfríes. – Sermón tragado. Ahora sí ya no puedo reprocharle nada, yo tengo a Maki después de todo.
-Tomo… - susurra - ¿tienes celos? ¿Aun te dan celos? – Me acerco a él mirándolo incrédulo.
-¿Cómo no voy a estar celoso? Sabes lo mucho que te amo Yuya – me ha salido. Es la primera vez que se lo digo y me ha salido sin pensar; prometí que no se lo diría para no asustarlo pero ha salido sólo. Sus ojos comienzan a tornarse carmín avecinando lágrimas. No por favor, que no llore, no más llanto, detesto que lo haga.
Me acerco y lo abrazo justo cuando comienzan sus sollozos. Mis dedos acarician sus cabellos lacios mientras se aferra a mi cuerpo. Entonces busca mis lábios, sí, él, el que había dicho que ya no más, que olvidara todo, que me quedara con mi novia. Él, está ahora rogándome que corresponda su beso frotando sus lábios con vehemencia sobre los míos.
Terminamos en la cama. Ahora no, no quiero detenerme, no por él, ahora pensaré en mí, sólo si él me pide alejarme lo haré. Pero parece que él tampoco quiere y tiene prisa; tantos años, tantos sentimientos, tanto deseo, tanto daño, tal vez esto es a lo único que podamos llegar, tal vez esto es lo que necesitamos para decir adiós por fin a este amor que no nos deja.
-Yuya, no me voy a detener – desabotono su camisa, todo bien… hasta ahora, no se resiste. De repente un escalofrío recorre todo mi cuerpo: su mano… ha comenzado a tocar mi miembro, a oprimirlo con fuerza, me estoy excitando, ¿eso es un ‘sí’? ¿Eso es un ‘no te detengas’? Y no lo haré. Estoy empezando a excitarme demasiado, quiero probar su piel, esa epidermis que he estado fuera de mi alcance ahora sucumbe ante mis caricias, tiembla, se emociona. Logro por fin quitarle la camisa, el pantalón es cosa fácil: un botón, la bragueta y la valla que forma su ropa interior entre su suculenta masculinidad y yo. Estoy nervioso, lo acepto; no es que yo sea un experto en esto, pero no es sólo eso, es la sensación de hormigueo por todo mi cuerpo estar aquí… con Yuya, mi Yuya, la única persona que he amado desde que tenía cuatro años. Ahora soy yo quien juguetea con su pene. Mi lengua recorre sus pequeños y marrones pezones. Comienza a gemir, con esa voz angelical que amo tanto, es como una melodía de placer que se pierde en mis sentidos haciéndome desear más: y lo consigo. Lo he desnudado por completo en un arranque de lujuria, ya no puedo más con esto, verlo así, contemplar su desnudes, mostrando esa nueva faceta de sensualidad y ternura. Pruebo nuevamente sus lábios, jugosos, su cuello, sus hombros. Ahora es él quien desabrocha mi pantalón, le ayudo a retirarlo, desabotona mi camisa pero la ansiedad ya no me da tiempo de arrancarla por completo, mi miembro necesita ese siguiente paso.
Busco su entrada con mis dedos, gime, jadea, incluso babea ante la excitación. Se siente cálido, me hace temblar. Mi mente se llena de suculentos pensamientos al imaginar lo que se sentirá que mi miembro esté dentro de esta estrecha cavidad. Empieza a humedecerse, incluso se siente más flexible ¿es así como debo hacerlo? Para no lastimarlo, porque no quiero que llore. Acaricio su mejilla y él asiente mordiéndose el labio. Entonces comienzo. Al primer contacto siento como si algo se abriera en mi interior, un placer infinito, aunque es sólo contacto, no sé si sea por morbo o por deseo, ya no sé qué pasa por mi mente. Comienzo a adentrarme, despacio, jadeo, siento, exploro; es caliente, húmedo, profundo, estrecho. Quiero probar más, quiero tener más, entrar completamente, que me reviente los tímpanos con su gimoteo sensual. Tantos pensamientos que despiertan mis ganas de no terminar nunca. Por fin lo logro. Yuya aprieta las sábanas con fuerza mientras se retuerce sobre la cama. Comienzo a moverme, primero despacio, mis piernas se han entumido por lo que ahora es más difícil, pero lo logró. A un ritmo, luego más y más rápido. Siento como un terremoto y en mi estómago; mi respiración va y viene en una y otra exhalación. Mis manos están sudando tanto que las caderas de Tego se resbalan lo cual hace la penetración más difícil. Me sostengo un poco de su miembro, jalándolo un poco cruel pero provocándole gemidos de incontenible placer. Humedad, en mi mano, en su pierna, sobre las sábanas. El tiempo se detiene cuando derramo mi semen en su interior y él con un último grito se corre en mi mano.
Salgo de su interior casi de inmediato, cuando caigo en cuenta de todo lo que ha pasado. Me dejo caer en el otro extremo de la cama. Lo hicimos, eso que tratamos de evitar tantas veces salió por sí mismo, como si lo necesitáramos.
-Abrázame – solloza él. Me acerco lentamente y tomo su cuerpo entre mis brazos. - ¿Será lo último verdad? – Sigue llorando. No Yuya, no quiero que sea lo último, no quiero que sea el final.
-Lo será – susurro contra sus lábios y después le beso tiernamente. – Si tu quieres lo será.
Kashi- Mensajes : 185
Fecha de inscripción : 15/08/2011
Localización : Johnny's Land [acosando a Goseki con Koyama]
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
mami!! no comente el capitulo anterior y tambien lo lei :Clo siento.....
que padre va..... el tego pi es cada vez mas triste, ahora no podran parar......el maru ♥♥♥ su mami... tan linda ella....ryo e sun bribon....pero todo se le perdona.....le copiare y hare ese negocio tambien....madre la historia va mejor y mejor bravo.!!!!!
me encanto!!!
que padre va..... el tego pi es cada vez mas triste, ahora no podran parar......el maru ♥♥♥ su mami... tan linda ella....ryo e sun bribon....pero todo se le perdona.....le copiare y hare ese negocio tambien....madre la historia va mejor y mejor bravo.!!!!!
me encanto!!!
z@b-€r- Mensajes : 88
Fecha de inscripción : 01/11/2011
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
te tardaste!!!! >.<
jajaja ese vivo de ryo!!!! como no se me ocurre a mi esas ideas???
kamenashi no me das lastima!! et mereces verlos feliz y tu ser asi solo nada mas que una cogidita! sos un polvito malo!
keii baka!!! >.< me dio cosita por maru, pero bueno tiene al buta ahora no? n.n
jajajjajaj habla dormidito XD tarado!!! jajajajaj
como es que uno no ve nada en la lluvia y el otro lo ve tanto como para ayudarlo a levantarse del suelo? o.0
lo beso!!!! ojala que lo recuerde y no lo niegue!!!!
como que sera lo ultimo??? quiero que tengan mas sexo XD nah! y que se quieran! jijiji bueno ya se quieren n.nU
jajaja ese vivo de ryo!!!! como no se me ocurre a mi esas ideas???
kamenashi no me das lastima!! et mereces verlos feliz y tu ser asi solo nada mas que una cogidita! sos un polvito malo!
keii baka!!! >.< me dio cosita por maru, pero bueno tiene al buta ahora no? n.n
jajajjajaj habla dormidito XD tarado!!! jajajajaj
como es que uno no ve nada en la lluvia y el otro lo ve tanto como para ayudarlo a levantarse del suelo? o.0
lo beso!!!! ojala que lo recuerde y no lo niegue!!!!
como que sera lo ultimo??? quiero que tengan mas sexo XD nah! y que se quieran! jijiji bueno ya se quieren n.nU
Princesa Saranini de Ueda- Mensajes : 2587
Fecha de inscripción : 07/01/2011
Edad : 35
Localización : en UEPOPUTOPIA : soy la princesa hada que sirve al principito Ueda
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
Wooo!!! Faaaa!!!*3*
De luuujooo.. Me senti mao x i tuga..ya se siente como prostituga >< poobre.
Jaaa y ese Jin... Baaaka¡¡ Por andar de caliente ahora va aa ser pp ^^°
Jaa keii y maru me encaaantan y el pp d buta m da miedo OwO...
Jaaaaaaa !!! Ryo es un astuto!!! Eso debe ser buen negocio!! " apartador y conseguidor de ibros" Todo un amor!!
Wooo yaa Ryo yo se que tu sabes que todos sabemos que la autora sabe que tu kieres a kato!! Haaa Ryo con fiebre?? Nhaaaaa!!! Ryo sta caliente x culpa d shige... Ya m imagino semejante carrera k pegaron y Ryo todo sudajado ( combinacion entre sudado y mojado) pero naaada perdido!! Bien k besukeo a kato!!*3* true love!!
y Pi!! Que decir del macho alfa semental de la JE??
De luuujooo.. Me senti mao x i tuga..ya se siente como prostituga >< poobre.
Jaaa y ese Jin... Baaaka¡¡ Por andar de caliente ahora va aa ser pp ^^°
Jaa keii y maru me encaaantan y el pp d buta m da miedo OwO...
Jaaaaaaa !!! Ryo es un astuto!!! Eso debe ser buen negocio!! " apartador y conseguidor de ibros" Todo un amor!!
Wooo yaa Ryo yo se que tu sabes que todos sabemos que la autora sabe que tu kieres a kato!! Haaa Ryo con fiebre?? Nhaaaaa!!! Ryo sta caliente x culpa d shige... Ya m imagino semejante carrera k pegaron y Ryo todo sudajado ( combinacion entre sudado y mojado) pero naaada perdido!! Bien k besukeo a kato!!*3* true love!!
y Pi!! Que decir del macho alfa semental de la JE??
DANNYKAZU- Mensajes : 627
Fecha de inscripción : 29/06/2011
Edad : 37
Localización : en el caparazon de kazu
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
[Kamenashi]
-Kazuya, traje cajas… ¿Kazuya?
-Déjame… - sale de mi habitación y deja las cajas en el suelo.
Esta ventana me trae tantos recuerdos. Miro a través de ella el pasado, esos recuerdos felices de la primera vez que lo vi. Estaba justo asomado aquí. Acabábamos de mudarnos, sólo tenía siete años. Mi madre estaba terminando de descargar cajas del auto y yo corrí a explorar la nueva casa, Entonces entre a esta habitación y me asomé por la ventana y ahí estaba él, del otro lado, jugaba. Cuando se percató de que lo observaba, se quitó la máscara de ‘Kamen rider’ y sonrió. Le sonreí como respuesta y corrí con mi madre a pedirle esa habitación como mía.
La ventana ahora está cerrada. Como quisiera que corriera las persianas y me viera de nuevo con esa sonrisa amable que tanto quiero. Vuelvo mi vista a la pila de cajas que ha dejado mi madre ¿cómo decirte Jin? ¿Cómo explicarte que no siento miedo ni pena? ¿Cómo decirte que me voy y que no quiero que sufras?
[Kato]
La alarma de mi despertador suena. Aun tengo sueño pero en cuanto recuerdo la noche anterior me levanto a toda prisa y busco a Ryo. Está durmiendo plácidamente en mi cama. Toco su frente, su temperatura ha regresado a la normalidad. Tuve que llamar al señor Koyama para que fuera a buscarnos al colegio; trajimos a Ryo aquí porque al parecer no hay nadie en su casa que lo cuide, me pregunto ¿qué hará cuando está enfermo? Siempre solo en esa enorme casa. Me alegro que esté mejor, ayer estuvo desmayado todo el rato desde lo que pasó… desde que me besó ¿Por qué lo hizo? ¿No se supone que quería que olvidara todo eso? Sonrío, sí, estoy feliz, no puedo evitarlo, no hay más qué decir… él me besó. Un sentimiento crece dentro de mí, como si me sintiera por fin correspondido. Comienza a despertar así que alejo con rapidez mi mano de su frente.
-Buenos días – balbuceo nervioso - ¿cómo te sientes?
-Fresco – sonríe y yo también por inercia, de repente la sonrisa desaparece de su rostro y me mira indaganre.
-Shige – Keii-chan a la puerta.
-Buenos días – le saludamos Ryo y yo al unísono.
-Ryo-chan ¿cómo te sientes?
-Cool, como siempre. – Sonríe pero ahora pesadamente.
-Bajen a desayunar, Ryo tu uniforme ya está limpio colgado en el armario de Shige – sale de la habitación. Ahora me siento incómodo, la expresión de Ryo no me gusta nada.
-Saldré para que te cambies – me levanto de la cama dispuesto a escapar.
-Shige… - me llama, lo miro y baja la cabeza – lo de ayer – siento mariposas revolotear en mi estómago, lo recuerda, pensé que quizás lo olvidaría, yo… - olvídalo por favor. – Me quedo estático observándolo, el me avade. Oh claro, pero es que eres iluso Shigeaki, era sólo una reacción de la fiebre, no es para nada que le gustes, no significa nada.
-No sé de qué hablas – sonrío con desinterés fingido, conteniendo todas mis emociones. Pero no podré hacerlo mucho tiempo. Salgo de mi cuarto y entro a la habitación contigua. Keii-chan está atando el nudo de su corbata y me mira extrañado al cerrar la puerta.
[Koyama]
Sus ojos rojizos y llenos de lágrimas me hacen salir del susto que me ha provocado su repentina aparición en mi alcoba.
-¿Shige…? – Corre hacia mí y hunde su cuerpo entre mis brazos, llora. No comprendo la razón, sólo lo abrazo si eso lo consuela un poco. Recupera un poco la compostura, sonríe y se disculpa pero no pienso soltarlo. Me pone mal verlo así.
*
Durante el desayuno y el camino el colegio fueron muy silenciosos, Ryo-chan se ve distante. Algo me dice que él sabe qué es lo que le pasa a Shige, pero no lo dirá. Me gustaría que Shige confiara un poco más en mí, que me contara que es lo que tiene Pueden ser muchas cosas, quizás Kusano lo esté molestando de nuevo. Aunque si es verdad que es por mí nunca me lo voy a perdonar, que por mi culpa Shige tenga que sufrir todo eso, aunque aun no sé si mi sospecha es cierta, debo averiguarlo, por el bien de Shige… no quiero que mi hermanito esté involucrado en todo esto.
*
En el receso decido que debo hablar con Hiro. Si es mentira lo que Shige piensa entonces quizás quede como un idiota, pero no pierdo nada; si es verdad lo mejor es que le deje claro de una vez por todas que mis intenciones con él no van más allá de una simple amistad, ni siquiera imaginándolo.
Le he pedido a un novato de primer grado que llame a Kusano detrás del gimnasio. No tarda mucho en aparecer. Pedí que no le dijeran que yo lo llamaba así que al verme su mirada es de confusión y nerviosismo.
-¿Me llamo senpai? – Se acerca cauteloso, quizás piensa que lo reñiré o algo así.
-No vengo en calidad de senpai… Hiro, vengo a pedirte explicaciones – está demasiado nervioso, quizás lo mejor sea preguntarle las cosas poco a poco, tal vez me pueda decir más de esa forma que siendo tan directo. Espera que yo siga hablando así que continuó - ¿Por qué con Shige? ¿Qué tienes contra él? – Pasan unos segundos, tal vez minutos de miradas evasivas antes de que decida contestar.
-Shige… es un empollón – oh Hiro… te conozco demasiado bien para saber que estás mintiendo.
-¿Y por eso lo molestas? ¿Qué tiene de malo? ¿Acaso te perjudica? – Agacha la cabeza, quizás me he pasado - ¿hay algo más Hiro? ¿Qué pasa contigo? Tu no eras esa clase de persona… me decepcionas. – Es todo, me voy y lo dejo. No resolví nada pero… no puedo hablar abiertamente de este tema, no puedo preguntarle a un chico de buenas a primeras si le gusto.
[Kato]
No tengo ganas de ver a Ryo ahora, no tengo ganas de ver a nadie. Me alejo de todos a la hora del descanso. Necesito pensar muchas cosas. Recorro los pasillos del colegio, los campos, el muro que nos divide del instituto femenino ¿por qué no fui normal? ¿Por qué no me enamoré de una chica como debió ser? ¿Qué hay de malo en mí? ¿Fueron las circunstancias? ¿Fue mi naturaleza? Hay tantas cosas que no comprendo aun, quizás no fui hecho para tener una vida normal rodeado de personas, tal vez debí quedarme en la granja y dedicarle mi vida a la soledad… quizás.
Un extraño sollozo capta mi atención cuando voy caminando por detrás del gimnasio. Un chico con el rostro hundido entre las rodillas llora, me acerco y me doy cuenta que es Kusano. ¿Qué debería hacer? Quizás burlarme de él por estar en ese estado, después de todo lo que me ha hecho, aunque de alguna forma me sabe malo verlo así, quizás pueda ayudarlo.
Me siento junto a él en silencio. Ya ha notado mi presencia y disimuladamente limpia sus lágrimas.
-¿Qué quieres? – Admito que esperaba ese comportamiento - ¿te vas a burlar de mí?
-No… yo no soy como tú, no me burlo del sufrimiento de la gente – suelta una sorna risita - ¿qué pasa?
-¿Qué te hace pensar que te diré? – En tono irónico.
-Bueno, si quieres llamo a Subaru para que te vea en ese estado y le cuentes - ¿jugamos con el sarcasmo?
-No juegues conmigo Shige – se pone de pie – entiende… ¡te odio! No entiendo ¿por qué Koyama te defiende tanto? ¿Qué tienes tú de especial? ¡Te aborrezco! - Se da la vuelta y corre. Kusano… me da un poco de pena, yo sé que hay algo más, sé que quiere a Keii-chan y entiendo cómo debería estar sintiéndose respecto a que le guste un chico, peor a un, que ese chico sea el novio de su prima.
[Nakamaru]
Voy a dejar a Massu a casa. Aunque ya puede andar solo yo sé que finge un poquito para que lo acompañe a casa. Es tierno, yo le ayudo fingiendo que le creo y así pasamos más rato juntos sin que se note extraño. Al llegar saca su llave y me invita a pasar, temo encontrarme a su padre pero me aclara que hoy trabaja hasta tarde y al parecer su madre tampoco está. Nosotros… solos en su casa… ¡auto control Yuichi!
-Tome asiento senpai ¿quiere algo de tomar? – Deja sus cosas en el sofá y va a la cocina, camina como sin nada eso me da gracia así que lo sigo y cuando abre la nevera lo abrazo por la espalda.
-Que bien caminas ahora – le susurro al oído, se pone tenso y de reojo observo como su rostro comienza a colorearse de carmín.
-Senpai… - dice despacio, con un tono de voz que me provoca ¿qué más da? Estamos solos, no es un secreto que lo deseo, es obvio, es mi novio y lo amo, es lógico que quiera tener… cercanía con él. ¿Cómo resistirme a ese temblorcito proveniente de su cuerpo que siento entre mis brazos? Todas las noches me pierdo en sucios pensamientos anteponiendo la llegada de este momento.
Busco su rostro, acaricio su barbilla con suavidad, me tiemblan ahora las yemas de los dedos. Lo beso despacio mientras giro por completo su cuerpo pegándolo a la nevera; sus brazos rodean mi cuello, uniendo más nuestros cuerpos, haciendo el beso más íntimo… mucho más íntimo, caliente, lleno de deseo… lo necesito. Quiero perderme en sus lábios, en su cuerpo… quiero… quiero…
-¡AAH! - ¿Eh? M e separo de él sorprendido por el grito ¿Massu? No… ese no ha sido Massu…
-Ma-ma-má – balbucea.
-¡Taka-chan! ¿¡Pero qué están haciendo!? – Oh no… Massu se suelta de mi agarre. ¡Ah! ¡Trágame tierra!
-Mamá no… ¡no es lo que piensas! – Eso no funcionará…
-Nakamaru-kun -Ay… volteo mi mirada a la furiosa madre de Massu. Me mira como queriendo asesinarme. – Si mi marido los hubiera visto… ¡seguro te asesina! Fuera de mi casa en este momento.
-¡Mamá!
-¡Cállate Takahisa! Nakamaru-kun fuera… ¡FUERA! – Miro a Massu y él asiente así que salgo a toda prisa, tomo mi mochila que está en el sillón y corro en dirección a mi casa. ¡Mierda! Debí llevarme a Masu… si algo le pasa será mi culpa.
-Kazuya, traje cajas… ¿Kazuya?
-Déjame… - sale de mi habitación y deja las cajas en el suelo.
Esta ventana me trae tantos recuerdos. Miro a través de ella el pasado, esos recuerdos felices de la primera vez que lo vi. Estaba justo asomado aquí. Acabábamos de mudarnos, sólo tenía siete años. Mi madre estaba terminando de descargar cajas del auto y yo corrí a explorar la nueva casa, Entonces entre a esta habitación y me asomé por la ventana y ahí estaba él, del otro lado, jugaba. Cuando se percató de que lo observaba, se quitó la máscara de ‘Kamen rider’ y sonrió. Le sonreí como respuesta y corrí con mi madre a pedirle esa habitación como mía.
La ventana ahora está cerrada. Como quisiera que corriera las persianas y me viera de nuevo con esa sonrisa amable que tanto quiero. Vuelvo mi vista a la pila de cajas que ha dejado mi madre ¿cómo decirte Jin? ¿Cómo explicarte que no siento miedo ni pena? ¿Cómo decirte que me voy y que no quiero que sufras?
[Kato]
La alarma de mi despertador suena. Aun tengo sueño pero en cuanto recuerdo la noche anterior me levanto a toda prisa y busco a Ryo. Está durmiendo plácidamente en mi cama. Toco su frente, su temperatura ha regresado a la normalidad. Tuve que llamar al señor Koyama para que fuera a buscarnos al colegio; trajimos a Ryo aquí porque al parecer no hay nadie en su casa que lo cuide, me pregunto ¿qué hará cuando está enfermo? Siempre solo en esa enorme casa. Me alegro que esté mejor, ayer estuvo desmayado todo el rato desde lo que pasó… desde que me besó ¿Por qué lo hizo? ¿No se supone que quería que olvidara todo eso? Sonrío, sí, estoy feliz, no puedo evitarlo, no hay más qué decir… él me besó. Un sentimiento crece dentro de mí, como si me sintiera por fin correspondido. Comienza a despertar así que alejo con rapidez mi mano de su frente.
-Buenos días – balbuceo nervioso - ¿cómo te sientes?
-Fresco – sonríe y yo también por inercia, de repente la sonrisa desaparece de su rostro y me mira indaganre.
-Shige – Keii-chan a la puerta.
-Buenos días – le saludamos Ryo y yo al unísono.
-Ryo-chan ¿cómo te sientes?
-Cool, como siempre. – Sonríe pero ahora pesadamente.
-Bajen a desayunar, Ryo tu uniforme ya está limpio colgado en el armario de Shige – sale de la habitación. Ahora me siento incómodo, la expresión de Ryo no me gusta nada.
-Saldré para que te cambies – me levanto de la cama dispuesto a escapar.
-Shige… - me llama, lo miro y baja la cabeza – lo de ayer – siento mariposas revolotear en mi estómago, lo recuerda, pensé que quizás lo olvidaría, yo… - olvídalo por favor. – Me quedo estático observándolo, el me avade. Oh claro, pero es que eres iluso Shigeaki, era sólo una reacción de la fiebre, no es para nada que le gustes, no significa nada.
-No sé de qué hablas – sonrío con desinterés fingido, conteniendo todas mis emociones. Pero no podré hacerlo mucho tiempo. Salgo de mi cuarto y entro a la habitación contigua. Keii-chan está atando el nudo de su corbata y me mira extrañado al cerrar la puerta.
[Koyama]
Sus ojos rojizos y llenos de lágrimas me hacen salir del susto que me ha provocado su repentina aparición en mi alcoba.
-¿Shige…? – Corre hacia mí y hunde su cuerpo entre mis brazos, llora. No comprendo la razón, sólo lo abrazo si eso lo consuela un poco. Recupera un poco la compostura, sonríe y se disculpa pero no pienso soltarlo. Me pone mal verlo así.
*
Durante el desayuno y el camino el colegio fueron muy silenciosos, Ryo-chan se ve distante. Algo me dice que él sabe qué es lo que le pasa a Shige, pero no lo dirá. Me gustaría que Shige confiara un poco más en mí, que me contara que es lo que tiene Pueden ser muchas cosas, quizás Kusano lo esté molestando de nuevo. Aunque si es verdad que es por mí nunca me lo voy a perdonar, que por mi culpa Shige tenga que sufrir todo eso, aunque aun no sé si mi sospecha es cierta, debo averiguarlo, por el bien de Shige… no quiero que mi hermanito esté involucrado en todo esto.
*
En el receso decido que debo hablar con Hiro. Si es mentira lo que Shige piensa entonces quizás quede como un idiota, pero no pierdo nada; si es verdad lo mejor es que le deje claro de una vez por todas que mis intenciones con él no van más allá de una simple amistad, ni siquiera imaginándolo.
Le he pedido a un novato de primer grado que llame a Kusano detrás del gimnasio. No tarda mucho en aparecer. Pedí que no le dijeran que yo lo llamaba así que al verme su mirada es de confusión y nerviosismo.
-¿Me llamo senpai? – Se acerca cauteloso, quizás piensa que lo reñiré o algo así.
-No vengo en calidad de senpai… Hiro, vengo a pedirte explicaciones – está demasiado nervioso, quizás lo mejor sea preguntarle las cosas poco a poco, tal vez me pueda decir más de esa forma que siendo tan directo. Espera que yo siga hablando así que continuó - ¿Por qué con Shige? ¿Qué tienes contra él? – Pasan unos segundos, tal vez minutos de miradas evasivas antes de que decida contestar.
-Shige… es un empollón – oh Hiro… te conozco demasiado bien para saber que estás mintiendo.
-¿Y por eso lo molestas? ¿Qué tiene de malo? ¿Acaso te perjudica? – Agacha la cabeza, quizás me he pasado - ¿hay algo más Hiro? ¿Qué pasa contigo? Tu no eras esa clase de persona… me decepcionas. – Es todo, me voy y lo dejo. No resolví nada pero… no puedo hablar abiertamente de este tema, no puedo preguntarle a un chico de buenas a primeras si le gusto.
[Kato]
No tengo ganas de ver a Ryo ahora, no tengo ganas de ver a nadie. Me alejo de todos a la hora del descanso. Necesito pensar muchas cosas. Recorro los pasillos del colegio, los campos, el muro que nos divide del instituto femenino ¿por qué no fui normal? ¿Por qué no me enamoré de una chica como debió ser? ¿Qué hay de malo en mí? ¿Fueron las circunstancias? ¿Fue mi naturaleza? Hay tantas cosas que no comprendo aun, quizás no fui hecho para tener una vida normal rodeado de personas, tal vez debí quedarme en la granja y dedicarle mi vida a la soledad… quizás.
Un extraño sollozo capta mi atención cuando voy caminando por detrás del gimnasio. Un chico con el rostro hundido entre las rodillas llora, me acerco y me doy cuenta que es Kusano. ¿Qué debería hacer? Quizás burlarme de él por estar en ese estado, después de todo lo que me ha hecho, aunque de alguna forma me sabe malo verlo así, quizás pueda ayudarlo.
Me siento junto a él en silencio. Ya ha notado mi presencia y disimuladamente limpia sus lágrimas.
-¿Qué quieres? – Admito que esperaba ese comportamiento - ¿te vas a burlar de mí?
-No… yo no soy como tú, no me burlo del sufrimiento de la gente – suelta una sorna risita - ¿qué pasa?
-¿Qué te hace pensar que te diré? – En tono irónico.
-Bueno, si quieres llamo a Subaru para que te vea en ese estado y le cuentes - ¿jugamos con el sarcasmo?
-No juegues conmigo Shige – se pone de pie – entiende… ¡te odio! No entiendo ¿por qué Koyama te defiende tanto? ¿Qué tienes tú de especial? ¡Te aborrezco! - Se da la vuelta y corre. Kusano… me da un poco de pena, yo sé que hay algo más, sé que quiere a Keii-chan y entiendo cómo debería estar sintiéndose respecto a que le guste un chico, peor a un, que ese chico sea el novio de su prima.
[Nakamaru]
Voy a dejar a Massu a casa. Aunque ya puede andar solo yo sé que finge un poquito para que lo acompañe a casa. Es tierno, yo le ayudo fingiendo que le creo y así pasamos más rato juntos sin que se note extraño. Al llegar saca su llave y me invita a pasar, temo encontrarme a su padre pero me aclara que hoy trabaja hasta tarde y al parecer su madre tampoco está. Nosotros… solos en su casa… ¡auto control Yuichi!
-Tome asiento senpai ¿quiere algo de tomar? – Deja sus cosas en el sofá y va a la cocina, camina como sin nada eso me da gracia así que lo sigo y cuando abre la nevera lo abrazo por la espalda.
-Que bien caminas ahora – le susurro al oído, se pone tenso y de reojo observo como su rostro comienza a colorearse de carmín.
-Senpai… - dice despacio, con un tono de voz que me provoca ¿qué más da? Estamos solos, no es un secreto que lo deseo, es obvio, es mi novio y lo amo, es lógico que quiera tener… cercanía con él. ¿Cómo resistirme a ese temblorcito proveniente de su cuerpo que siento entre mis brazos? Todas las noches me pierdo en sucios pensamientos anteponiendo la llegada de este momento.
Busco su rostro, acaricio su barbilla con suavidad, me tiemblan ahora las yemas de los dedos. Lo beso despacio mientras giro por completo su cuerpo pegándolo a la nevera; sus brazos rodean mi cuello, uniendo más nuestros cuerpos, haciendo el beso más íntimo… mucho más íntimo, caliente, lleno de deseo… lo necesito. Quiero perderme en sus lábios, en su cuerpo… quiero… quiero…
-¡AAH! - ¿Eh? M e separo de él sorprendido por el grito ¿Massu? No… ese no ha sido Massu…
-Ma-ma-má – balbucea.
-¡Taka-chan! ¿¡Pero qué están haciendo!? – Oh no… Massu se suelta de mi agarre. ¡Ah! ¡Trágame tierra!
-Mamá no… ¡no es lo que piensas! – Eso no funcionará…
-Nakamaru-kun -Ay… volteo mi mirada a la furiosa madre de Massu. Me mira como queriendo asesinarme. – Si mi marido los hubiera visto… ¡seguro te asesina! Fuera de mi casa en este momento.
-¡Mamá!
-¡Cállate Takahisa! Nakamaru-kun fuera… ¡FUERA! – Miro a Massu y él asiente así que salgo a toda prisa, tomo mi mochila que está en el sillón y corro en dirección a mi casa. ¡Mierda! Debí llevarme a Masu… si algo le pasa será mi culpa.
Kashi- Mensajes : 185
Fecha de inscripción : 15/08/2011
Localización : Johnny's Land [acosando a Goseki con Koyama]
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
oh no kame se va!!!!!!!!!!! jin o no k situacion
ryo me hace llorar xk hace eso...yo se k tambien lo quiere.... pero no es justo pobre shige, y keii...en la mayoria de tus historias el es hetero jajajajaj k lindo pero lo k me preocupo fue el massumaru...la suegra los cacho massu pobrecito que le pasara.....corre peligro su padre me da miedo o noooooooooo
k buen capitulo +++++++
ryo me hace llorar xk hace eso...yo se k tambien lo quiere.... pero no es justo pobre shige, y keii...en la mayoria de tus historias el es hetero jajajajaj k lindo pero lo k me preocupo fue el massumaru...la suegra los cacho massu pobrecito que le pasara.....corre peligro su padre me da miedo o noooooooooo
k buen capitulo +++++++
z@b-€r- Mensajes : 88
Fecha de inscripción : 01/11/2011
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
*hace una fiesta* kame se va de la historiaaa urrrraaaa!!!!!
ryo....
que kuno se coma a keii
done esta ueda y jinjincito??? hotel ??? jijijijiji
fue muy cortito!!!!
ryo....
que kuno se coma a keii
done esta ueda y jinjincito??? hotel ??? jijijijiji
fue muy cortito!!!!
Princesa Saranini de Ueda- Mensajes : 2587
Fecha de inscripción : 07/01/2011
Edad : 35
Localización : en UEPOPUTOPIA : soy la princesa hada que sirve al principito Ueda
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
Hum... Chikita pero intensa!!! La contiiii la contiii!! :3 XD!!
Hijaaaa mami es tu fan ;-; Kame.. Cajas??? No siente pena? Sera k kame descuartizara a Jin y lo metera en cajas??. No vdd??... Jajaja keii baka.. Al fin de cuentas se kedo en la misma siuacion! Que liado!
Haaa ese par de bakas ! Nishikido ... Yaa deja de fingir ke por calenturiento besaste al aldillo!!ÒÓ si bien k.sabemos que sabes que fue x amorr~~
Yaa vez lo que provocas? Ryo !eres bipolar!!!!!!!!! T recomdendare un psicolgo!!!
Haaa hhahahahhaha jajajajajajajajajajaja jajajajajajajajajajajajajajaja haaahaaa Maruuu jajajaja te cayó el chamucoo !! La suegra!! Hahaahahahahahaha
Hijaaaa mami es tu fan ;-; Kame.. Cajas??? No siente pena? Sera k kame descuartizara a Jin y lo metera en cajas??. No vdd??... Jajaja keii baka.. Al fin de cuentas se kedo en la misma siuacion! Que liado!
Haaa ese par de bakas ! Nishikido ... Yaa deja de fingir ke por calenturiento besaste al aldillo!!ÒÓ si bien k.sabemos que sabes que fue x amorr~~
Yaa vez lo que provocas? Ryo !eres bipolar!!!!!!!!! T recomdendare un psicolgo!!!
Haaa hhahahahhaha jajajajajajajajajajaja jajajajajajajajajajajajajajaja haaahaaa Maruuu jajajaja te cayó el chamucoo !! La suegra!! Hahaahahahahahaha
DANNYKAZU- Mensajes : 627
Fecha de inscripción : 29/06/2011
Edad : 37
Localización : en el caparazon de kazu
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
Holi c:
He terminado y comento :D
Eh~ He dichoq ue detesto el TeogoPi, en verdad me desepseran, si ya hasta follaron cual es el problema? Dios con estos, si van estar juntos esten juntos y punto, si van a separse dejense y ya ._.
Kame... Nouh!! Yo quería AKame y fuera Ueda con Sara (?)
En caunto al NishiKato.. ¿qué decir? Es amor~ es hermoso >.<! me encanta :D Pero Ahh! lloro con esto ;w;
Pero, pero askdla quiero más, *hablo resumidamente de todo el fic (?)*
Ah~ MassuMaru, todo pintaba tna bien apra ellos y el señor suegro
asd
conti
He terminado y comento :D
Eh~ He dichoq ue detesto el TeogoPi, en verdad me desepseran, si ya hasta follaron cual es el problema? Dios con estos, si van estar juntos esten juntos y punto, si van a separse dejense y ya ._.
Kame... Nouh!! Yo quería AKame y fuera Ueda con Sara (?)
En caunto al NishiKato.. ¿qué decir? Es amor~ es hermoso >.<! me encanta :D Pero Ahh! lloro con esto ;w;
Pero, pero askdla quiero más, *hablo resumidamente de todo el fic (?)*
Ah~ MassuMaru, todo pintaba tna bien apra ellos y el señor suegro
asd
conti
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
oh fuck!!! todo esta tremendamente bien!!! lo amo me encanta!!!
tegopi arg ke bonito lemon como pi relata me asdasd!..
y maru ag xD.. cochinote keria mas xD..
el akame! kiero akame ;^;!
no voy a hablar de nishikito ni shige.. ke estres -.-!
cntiiii!!!
tegopi arg ke bonito lemon como pi relata me asdasd!..
y maru ag xD.. cochinote keria mas xD..
el akame! kiero akame ;^;!
no voy a hablar de nishikito ni shige.. ke estres -.-!
cntiiii!!!
Usagi- Mensajes : 90
Fecha de inscripción : 13/09/2011
Edad : 34
Localización : con Teshi a mi lado♥ *w*
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
Amo este fanfic! no se si ya lo he dicho antes?. x3
me encanto el TegoPi~ porfin juntos ;--;! espero que duren y que Tego no vuelva a alejarlo, pobre Pi creo que no lo soportaria uwu.
Kato sigue sufriendo, y yo creo que Ryo siente lo mismo por él, pero no se atreve a decirlo xwx! Ryo malo~ hace sufrir a Shige.
En el Akame hay algo que no entendi muy bien...Kame se va? a donde? por que? entonces siempre amo a Jin~ >3<!
Y en el MassuMaru, todo iva tan bien con ellos, por que tenian que descubrirlos Dx!
Quiero conti~ ;--;!
me encanto el TegoPi~ porfin juntos ;--;! espero que duren y que Tego no vuelva a alejarlo, pobre Pi creo que no lo soportaria uwu.
Kato sigue sufriendo, y yo creo que Ryo siente lo mismo por él, pero no se atreve a decirlo xwx! Ryo malo~ hace sufrir a Shige.
En el Akame hay algo que no entendi muy bien...Kame se va? a donde? por que? entonces siempre amo a Jin~ >3<!
Y en el MassuMaru, todo iva tan bien con ellos, por que tenian que descubrirlos Dx!
Quiero conti~ ;--;!
Arioka_shinku- Mensajes : 39
Fecha de inscripción : 26/12/2011
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
[Koyama]
Kusano se ve ausente durante el entrenamiento ¿me habré pasado con él? Me preocupa. Al terminar reviso mi móvil, tengo un mensaje de Yu. Cada día falta menos para que podamos estar juntos; quiero casarme con ella después de entrar a la universidad y así nadie podrá separarnos jamás… pero… ¿qué haré? Si es cierto que a Kusano… bueno… que yo le… gusto ¿Si Yu se entera? No le agradaría mucho, debo averiguar si es cierto o no.
-Keiichiro – me llama el entrenador – el última día antes de las vacaciones haremos una fiesta para Kamenashi, te dejo a cargo de los arreglos.
-¿Fiesta?
-Se la merece, me duele que se va uno de mis mejores jugadores.
-¿Se va? ¿Kamenashi? ¿Q – Qué? ¿A dónde se va? – Ahora sí estoy confundido.
-¿No lo sabes? Kamenashi deja el instituto ¿no te dijo? Pensé qué eran amigos – Kame… ¿se va?
-¡Hironori! – Se acerca nervioso – ayuda a Koyama en todo lo que te pida. - ¿Fiesta? ¿Kazuya se va? Pero qué…
-Senpai…
-Hablamos luego Kusano.
[Yamashita]
Tegoshi y yo hemos estado muy cautelosos todo el día. Tan sólo verlo me eriza la piel, recordar su cuerpo desnudo, su tacto, sus besos, sus deliciosos gemidos… ¡ay no de nuevo! Si sigo así tendré que irme a atender al baño. Debo guardar la compostura, ya ha terminado la práctica y debo pasar por Maki al entrenamiento de ‘porristas’ no puedo creer que ni un montón de niñas saltando en minifalda no me pongan tanto como pensar en Tegoshi… eso ya no es normal.
Cuando llego por Maki todas sus amigas me miran y se codean, no sé que tanto estarán cuchicheando pero a Maki parece no importarle, al contrario, se regodea; sí, sí, sé que soy un galán, supongo que eso la pone a ella en una buena posición frente a las otras chicas. Corre hacía mí y me besa, está bien, le daré el gusto de que suba su popularidad un poco.
-¿Nos vamos Tomo? – Asiento y tomo su mano, mientras se despide con una expresión creída. – Por cierto Tomo~ ¿Tegoshi-kun tiene novia? - ¿¡Eeeeeeh!?
-Y eso ¿¡a ti que te interesa!?
-Tomo-chan~ ¿estás celoso? - ¿Celoso?
-¿Tu qué crees? – Claro, celoso ¡pero no de ti!
-¡Qué lindo~! – Me abraza de forma melosa – pero no te pongas así, yo sólo tengo ojos para ti… pero a una amiga le gusta él y bueno… como es tu amigo y yo soy tu novia…
-A Tegoshi sólo le interesa el futbol. – Es lo último que digo ¡ja! ¿Pero qué se cree? ¿Qué puede ir por allí ofreciendo a mis amigos? ¡En especial Tegoshi! ¡Me niego!
[Kato]
Pocas veces arrojo mis responsabilidades a la basura, todas han sido por lo mal que me deja Ryo, pero no se me antoja ir a la biblioteca, que se las apañe solo con eso. No sé qué piensa él ¿Qué yo ando besando a cualquiera? ¿Qué lo puedo olvidar con toda tranquilidad? No considera para nada mis sentimientos y yo no entiendo los suyos: un día me dice que no, después me besa, me ignora, nos amigamos, me besa de nuevo, me ignora otra vez ¡eso es cruel! Muy cruel… tan sólo pensar que quizás no es la persona de la que estoy enamorado me da ganas de llorar. Quiero llorar, llorar mucho… porque me duele… un dolor como nunca antes…
-¿Estás bien? – Me asusto. Una chica muy bonita está mirándome, tiene el uniforme del instituto femenino ¡claro! Si me pongo a llorar como Magdalena en un parque es obvio que alguien de buen corazón se preocupará. Sólo niego secándome las lágrimas, da igual, es una extraña - ¿Quieres? – Me ofrece un lindo durazno sentándose junto a mí. A Ryo le encantan los duraznos, una vez comimos tantos que sub pancita se veía hinchada le dije en broma que tendríamos un hijo y el muy bestia me golpeó. Sonrío al recordar eso, de alguna forma es nostálgico, tanto que mis lágrimas comienzan a salir nuevamente.
-¡Hey! ¡El durazno era para alegrarte no para que lloraras! – Reclama.
-Perdón…
-Sea lo que sea… no llores chico - ¿chico?
-Me llamo… Shigeaki
-¿Shigeaki? ¿Qué clase de nombre ridículo es ese? – No puede ser ¿otra como Ryo-chan? - ¿Puedo llamarte Shige? – Le digo que sí, da igual, creo que me gusta más así. – Puedes llamarme Aya.
-Aya… quizás yo no estaría llorando si me hubiera enamorado de una chica linda como tú.
-Vaya… yo pensé que eras serio pero ya veo que eres un conquistador. - ¿Qué soy qué? Ahora ya no puedo ser sincero sobre lo que pienso, de verdad que no entiendo nada. Me pongo de pie, le agradezco la fruta y me marcho. Debería calmarme un poco antes de llegar a casa, no quiero más gente preocupada a mí alrededor. Cruzo por la sombra de un árbol y me encuentro a la persona que menos espero, o mejor dicho, que menos quiero ver.
-¿Ella es tu amiga? – Cuestiona. Fijo mi mirada hacia donde está la suya, se ver perfectamente la banca donde estaba conversando con Aya, de hecho ella sigue allí sentada jugando con un durazno entre sus dedos. De repente y sin darme cuenta el mío es arrebatado de mi mano y de inmediato Ryo encaja sus dientes en la jugosa fruta, escupe el trozo que se ha llevado a la boca, el resto lo tira con brusquedad en el césped, me mira con reproche y se va… ¿y yo soy el raro?
[Nakamaru]
-… eso dijo en entrenador… ¡Yuichi!
-¿Eh? ¿Qué?
-¡Te estoy hablando! – Perdón Keii… mi cabeza está llena de líos; se supone que vine a su casa a estudiar pero estoy más preocupado por Massu ¿y si su mamá lo delata con su padre? ¡Ay no! Sería el fin. Tengo que buscar la forma de estar juntos, pero primero necesito saber si él está bien. Es noche ya, le marqué al móvil toda la tarde pero lo tiene apagado ¿se lo habrán confiscado? ¿Y si le prohíben que nos veamos de nuevo? Lo sacaran de la escuela seguro, ¡o lo confinaran en la torre más alta de un castillo custodiado por un dragón!
-¡Necesito conseguir un caballo!
-¿Para qué quieres un caballo?
-Para rescatar al príncipe Masu… -oh… tapo mi boca en cuanto me doy cuenta que he hablado en voz alta. Keii-chan me mira curioso, se cruza de brazos y pregunta.
-Y dígame Sir Yuichi… ¿de quién va a rescatar al príncipe Masu? – Se burla.
-Keii-chan… yo… quiero contarte algo.
-Soy todo oídos. – Respiro profundo. No tengo porque temer, es mi mejor amigo.
-Masu y yo… somos novios…
[Koyama]
-Masu y yo… comos novios - … - quería decírtelo desde hace mucho… -¿mucho?
-¿Qué? – Siento como si me cayera un balde de agua fría - ¿Qué tu qué? ¡Debiste decírmelo! –Le reprocho un poco en broma y un poco en serio, principalmente porque no sé qué decir. Este tipo de cosas se están saliendo de control a mí alrededor, me abruma, ya no sé si está bien o mal o qué es en verdad lo que pienso respecto a este tema. Quizás por el momento debería callar y apoyar a mi amigo lo más que pueda – ¿de qué lo tenemos que rescatar? – Sonríe un poco, aunque su mirada se ve sombría.
-Nos descubrieron… - su voz se apaga – su madre… si su padre se entera… será el fin Keii.
-Lo solucionaremos Yu-chan – pongo mi mano en su hombro y sonríe – hay demasiado que resolver, también lo de Kame…
-¿Eh? ¿Qué pasa con Kame?
-Te lo he dicho ya ¡baka! – le doy un golpe en la cabeza - ¡se va del colegio! Tenemos que decirle a los otros.
*
Les llamamos esperando que lleguen, les dije que habría ramen gratis en la tienda así que en menos de diez minutos ya están aquí; bien, no hay ramen gratis, tendrpe que pagarlo yo y espero que mi madre me haga un descuento.
Todos comen y charlan animados… un poco, quizás es el estrés que los tiene tan apagados. Yuichi me mira y asiente así que me pongo de pie y hablo.
-Chicos, perdón por llamarlos, sé que andan ocupados estudiando para los exámenes y eso…
-Yo no
-Bueno, menos Jin – ríen – pero hay algo que tienen que saber ¿verdad Kame? – le miro y todos me siguen - ¿es cierto que te vas del colegio? – Silencio. Todos se quedan sorprendidos; Ryo con la boca abierta, Tego deja caer sus palillos en la mesa, Shige le da palmadas a Jin para que no se ahogue – ¿es cierto? – Le pregunto de nuevo, pero él sólo agacha la cabeza y asiente despacio.
-Me voy de la ciudad – en un susurro que a no ser por el abrumador silencio no habríamos escuchado.
-Kame… - Jin recupera su color y es el primero que se atreve a hablar.
-Lo siento… - sale del restaurant corriendo…
-¡Kame! - … y Jin tras él…
[Akanishi]
-¡Kame! – Sigo gritando mientras corro tras él, se ha ido del lado contrario de nuestras casas ¿a dónde va? De repente lo veo desplomarse cayendo de rodillas al pavimento; corro más rápido hasta alcanzarlo. Llora; lo abrazo mientras sigue llorando y yo también quiero llorar, Kazu… mi Kazu se va.
-Perdóname Jin – murmura entre sollozos.
-Vamos a casa Kame. – Lo levanto como puedo tratando de contener mis lágrimas. Me cuesta mucho trabajo, se va… yo no puedo hacer nada.
Estando en mi casa subimos rápido a mi habitación para evitar las preguntas, aunque ya sé que a mis padres no les interesaría.
Guardo silencio un rato. Quiero que se calme primero o me hará llorar. Y no debo llorar, porque eso lo pondrá peor. Seca sus lágrimas tratando de recuperarse y se queda mirando a un punto con la mirada gris.
-¿Por qué no me habías dicho? – Silencio - ¿Kame?
-Lo siento…
-¿Por qué no me habías dicho? – Pregunto de nuevo desesperándome un poco.
-Jin…
-¿Por qué tuve que enterarme apenas como todos ellos? Sé que no me amas como yo a ti ¡Pero somos mejores amigos! – Se queda cabizbajo llorando en silencio. Estoy ofendido, sí, pero mi orgullo no es la prioridad ahora, Kame se va… -¿A dónde?
-Los Angeles – dice.
-¿Lo-lo-los Angeles? ¿¡América!? – Asiente – América – susurro una y otra vez.
-Jin… yo no quería…
-¿Cuándo? -
-Después… de navidad… -¿tan pronto? – Jin…
-Te quedarás conmigo en navidad ¿verdad? –Le pido con ojos llorosos. Lo hacemos cada año y no quiero que este sea diferente. – Por favor.
-Jin… pero –titubea - ¿Y Ueda? – Ueda…
-Kame… - ¿Por qué piensa en eso ahora? Después de todo lo que me ha reprochado por estar con Ueda.
-Cuando yo me vaya quédate con él y enamórate ¿sí? – Pero ¿qué? Yo quiero a Ueda, es cierto, me ha ayudado mucho… pero… ¿enamorarme? – Si me dices que sí… me iré tranquilo, así que promételo Jin.
-Kame… - sonríe un poco ¿así que eso te dejará más tranquilo? – Lo prometo… - lamento que sea una mentira.
Kusano se ve ausente durante el entrenamiento ¿me habré pasado con él? Me preocupa. Al terminar reviso mi móvil, tengo un mensaje de Yu. Cada día falta menos para que podamos estar juntos; quiero casarme con ella después de entrar a la universidad y así nadie podrá separarnos jamás… pero… ¿qué haré? Si es cierto que a Kusano… bueno… que yo le… gusto ¿Si Yu se entera? No le agradaría mucho, debo averiguar si es cierto o no.
-Keiichiro – me llama el entrenador – el última día antes de las vacaciones haremos una fiesta para Kamenashi, te dejo a cargo de los arreglos.
-¿Fiesta?
-Se la merece, me duele que se va uno de mis mejores jugadores.
-¿Se va? ¿Kamenashi? ¿Q – Qué? ¿A dónde se va? – Ahora sí estoy confundido.
-¿No lo sabes? Kamenashi deja el instituto ¿no te dijo? Pensé qué eran amigos – Kame… ¿se va?
-¡Hironori! – Se acerca nervioso – ayuda a Koyama en todo lo que te pida. - ¿Fiesta? ¿Kazuya se va? Pero qué…
-Senpai…
-Hablamos luego Kusano.
[Yamashita]
Tegoshi y yo hemos estado muy cautelosos todo el día. Tan sólo verlo me eriza la piel, recordar su cuerpo desnudo, su tacto, sus besos, sus deliciosos gemidos… ¡ay no de nuevo! Si sigo así tendré que irme a atender al baño. Debo guardar la compostura, ya ha terminado la práctica y debo pasar por Maki al entrenamiento de ‘porristas’ no puedo creer que ni un montón de niñas saltando en minifalda no me pongan tanto como pensar en Tegoshi… eso ya no es normal.
Cuando llego por Maki todas sus amigas me miran y se codean, no sé que tanto estarán cuchicheando pero a Maki parece no importarle, al contrario, se regodea; sí, sí, sé que soy un galán, supongo que eso la pone a ella en una buena posición frente a las otras chicas. Corre hacía mí y me besa, está bien, le daré el gusto de que suba su popularidad un poco.
-¿Nos vamos Tomo? – Asiento y tomo su mano, mientras se despide con una expresión creída. – Por cierto Tomo~ ¿Tegoshi-kun tiene novia? - ¿¡Eeeeeeh!?
-Y eso ¿¡a ti que te interesa!?
-Tomo-chan~ ¿estás celoso? - ¿Celoso?
-¿Tu qué crees? – Claro, celoso ¡pero no de ti!
-¡Qué lindo~! – Me abraza de forma melosa – pero no te pongas así, yo sólo tengo ojos para ti… pero a una amiga le gusta él y bueno… como es tu amigo y yo soy tu novia…
-A Tegoshi sólo le interesa el futbol. – Es lo último que digo ¡ja! ¿Pero qué se cree? ¿Qué puede ir por allí ofreciendo a mis amigos? ¡En especial Tegoshi! ¡Me niego!
[Kato]
Pocas veces arrojo mis responsabilidades a la basura, todas han sido por lo mal que me deja Ryo, pero no se me antoja ir a la biblioteca, que se las apañe solo con eso. No sé qué piensa él ¿Qué yo ando besando a cualquiera? ¿Qué lo puedo olvidar con toda tranquilidad? No considera para nada mis sentimientos y yo no entiendo los suyos: un día me dice que no, después me besa, me ignora, nos amigamos, me besa de nuevo, me ignora otra vez ¡eso es cruel! Muy cruel… tan sólo pensar que quizás no es la persona de la que estoy enamorado me da ganas de llorar. Quiero llorar, llorar mucho… porque me duele… un dolor como nunca antes…
-¿Estás bien? – Me asusto. Una chica muy bonita está mirándome, tiene el uniforme del instituto femenino ¡claro! Si me pongo a llorar como Magdalena en un parque es obvio que alguien de buen corazón se preocupará. Sólo niego secándome las lágrimas, da igual, es una extraña - ¿Quieres? – Me ofrece un lindo durazno sentándose junto a mí. A Ryo le encantan los duraznos, una vez comimos tantos que sub pancita se veía hinchada le dije en broma que tendríamos un hijo y el muy bestia me golpeó. Sonrío al recordar eso, de alguna forma es nostálgico, tanto que mis lágrimas comienzan a salir nuevamente.
-¡Hey! ¡El durazno era para alegrarte no para que lloraras! – Reclama.
-Perdón…
-Sea lo que sea… no llores chico - ¿chico?
-Me llamo… Shigeaki
-¿Shigeaki? ¿Qué clase de nombre ridículo es ese? – No puede ser ¿otra como Ryo-chan? - ¿Puedo llamarte Shige? – Le digo que sí, da igual, creo que me gusta más así. – Puedes llamarme Aya.
-Aya… quizás yo no estaría llorando si me hubiera enamorado de una chica linda como tú.
-Vaya… yo pensé que eras serio pero ya veo que eres un conquistador. - ¿Qué soy qué? Ahora ya no puedo ser sincero sobre lo que pienso, de verdad que no entiendo nada. Me pongo de pie, le agradezco la fruta y me marcho. Debería calmarme un poco antes de llegar a casa, no quiero más gente preocupada a mí alrededor. Cruzo por la sombra de un árbol y me encuentro a la persona que menos espero, o mejor dicho, que menos quiero ver.
-¿Ella es tu amiga? – Cuestiona. Fijo mi mirada hacia donde está la suya, se ver perfectamente la banca donde estaba conversando con Aya, de hecho ella sigue allí sentada jugando con un durazno entre sus dedos. De repente y sin darme cuenta el mío es arrebatado de mi mano y de inmediato Ryo encaja sus dientes en la jugosa fruta, escupe el trozo que se ha llevado a la boca, el resto lo tira con brusquedad en el césped, me mira con reproche y se va… ¿y yo soy el raro?
[Nakamaru]
-… eso dijo en entrenador… ¡Yuichi!
-¿Eh? ¿Qué?
-¡Te estoy hablando! – Perdón Keii… mi cabeza está llena de líos; se supone que vine a su casa a estudiar pero estoy más preocupado por Massu ¿y si su mamá lo delata con su padre? ¡Ay no! Sería el fin. Tengo que buscar la forma de estar juntos, pero primero necesito saber si él está bien. Es noche ya, le marqué al móvil toda la tarde pero lo tiene apagado ¿se lo habrán confiscado? ¿Y si le prohíben que nos veamos de nuevo? Lo sacaran de la escuela seguro, ¡o lo confinaran en la torre más alta de un castillo custodiado por un dragón!
-¡Necesito conseguir un caballo!
-¿Para qué quieres un caballo?
-Para rescatar al príncipe Masu… -oh… tapo mi boca en cuanto me doy cuenta que he hablado en voz alta. Keii-chan me mira curioso, se cruza de brazos y pregunta.
-Y dígame Sir Yuichi… ¿de quién va a rescatar al príncipe Masu? – Se burla.
-Keii-chan… yo… quiero contarte algo.
-Soy todo oídos. – Respiro profundo. No tengo porque temer, es mi mejor amigo.
-Masu y yo… somos novios…
[Koyama]
-Masu y yo… comos novios - … - quería decírtelo desde hace mucho… -¿mucho?
-¿Qué? – Siento como si me cayera un balde de agua fría - ¿Qué tu qué? ¡Debiste decírmelo! –Le reprocho un poco en broma y un poco en serio, principalmente porque no sé qué decir. Este tipo de cosas se están saliendo de control a mí alrededor, me abruma, ya no sé si está bien o mal o qué es en verdad lo que pienso respecto a este tema. Quizás por el momento debería callar y apoyar a mi amigo lo más que pueda – ¿de qué lo tenemos que rescatar? – Sonríe un poco, aunque su mirada se ve sombría.
-Nos descubrieron… - su voz se apaga – su madre… si su padre se entera… será el fin Keii.
-Lo solucionaremos Yu-chan – pongo mi mano en su hombro y sonríe – hay demasiado que resolver, también lo de Kame…
-¿Eh? ¿Qué pasa con Kame?
-Te lo he dicho ya ¡baka! – le doy un golpe en la cabeza - ¡se va del colegio! Tenemos que decirle a los otros.
*
Les llamamos esperando que lleguen, les dije que habría ramen gratis en la tienda así que en menos de diez minutos ya están aquí; bien, no hay ramen gratis, tendrpe que pagarlo yo y espero que mi madre me haga un descuento.
Todos comen y charlan animados… un poco, quizás es el estrés que los tiene tan apagados. Yuichi me mira y asiente así que me pongo de pie y hablo.
-Chicos, perdón por llamarlos, sé que andan ocupados estudiando para los exámenes y eso…
-Yo no
-Bueno, menos Jin – ríen – pero hay algo que tienen que saber ¿verdad Kame? – le miro y todos me siguen - ¿es cierto que te vas del colegio? – Silencio. Todos se quedan sorprendidos; Ryo con la boca abierta, Tego deja caer sus palillos en la mesa, Shige le da palmadas a Jin para que no se ahogue – ¿es cierto? – Le pregunto de nuevo, pero él sólo agacha la cabeza y asiente despacio.
-Me voy de la ciudad – en un susurro que a no ser por el abrumador silencio no habríamos escuchado.
-Kame… - Jin recupera su color y es el primero que se atreve a hablar.
-Lo siento… - sale del restaurant corriendo…
-¡Kame! - … y Jin tras él…
[Akanishi]
-¡Kame! – Sigo gritando mientras corro tras él, se ha ido del lado contrario de nuestras casas ¿a dónde va? De repente lo veo desplomarse cayendo de rodillas al pavimento; corro más rápido hasta alcanzarlo. Llora; lo abrazo mientras sigue llorando y yo también quiero llorar, Kazu… mi Kazu se va.
-Perdóname Jin – murmura entre sollozos.
-Vamos a casa Kame. – Lo levanto como puedo tratando de contener mis lágrimas. Me cuesta mucho trabajo, se va… yo no puedo hacer nada.
Estando en mi casa subimos rápido a mi habitación para evitar las preguntas, aunque ya sé que a mis padres no les interesaría.
Guardo silencio un rato. Quiero que se calme primero o me hará llorar. Y no debo llorar, porque eso lo pondrá peor. Seca sus lágrimas tratando de recuperarse y se queda mirando a un punto con la mirada gris.
-¿Por qué no me habías dicho? – Silencio - ¿Kame?
-Lo siento…
-¿Por qué no me habías dicho? – Pregunto de nuevo desesperándome un poco.
-Jin…
-¿Por qué tuve que enterarme apenas como todos ellos? Sé que no me amas como yo a ti ¡Pero somos mejores amigos! – Se queda cabizbajo llorando en silencio. Estoy ofendido, sí, pero mi orgullo no es la prioridad ahora, Kame se va… -¿A dónde?
-Los Angeles – dice.
-¿Lo-lo-los Angeles? ¿¡América!? – Asiente – América – susurro una y otra vez.
-Jin… yo no quería…
-¿Cuándo? -
-Después… de navidad… -¿tan pronto? – Jin…
-Te quedarás conmigo en navidad ¿verdad? –Le pido con ojos llorosos. Lo hacemos cada año y no quiero que este sea diferente. – Por favor.
-Jin… pero –titubea - ¿Y Ueda? – Ueda…
-Kame… - ¿Por qué piensa en eso ahora? Después de todo lo que me ha reprochado por estar con Ueda.
-Cuando yo me vaya quédate con él y enamórate ¿sí? – Pero ¿qué? Yo quiero a Ueda, es cierto, me ha ayudado mucho… pero… ¿enamorarme? – Si me dices que sí… me iré tranquilo, así que promételo Jin.
-Kame… - sonríe un poco ¿así que eso te dejará más tranquilo? – Lo prometo… - lamento que sea una mentira.
Kashi- Mensajes : 185
Fecha de inscripción : 15/08/2011
Localización : Johnny's Land [acosando a Goseki con Koyama]
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
si quieres te ayudo keii, así kame se va mas rápido, digo, así se va con un lindo recuerdo!
yamapi y su celo me mato de risa!
que bestia ryo! me imagino que el golpe que le dio a shige fue jugando no? o de verdad le hizo tragar los dientes ? e.e
por que arruino esa fruta! con lo rica que es! que pesado, por dios!
maru!!! tenemos pensamientos parecidos >.<
jin, ojala que te mueras n.n
yamapi y su celo me mato de risa!
que bestia ryo! me imagino que el golpe que le dio a shige fue jugando no? o de verdad le hizo tragar los dientes ? e.e
por que arruino esa fruta! con lo rica que es! que pesado, por dios!
maru!!! tenemos pensamientos parecidos >.<
jin, ojala que te mueras n.n
Princesa Saranini de Ueda- Mensajes : 2587
Fecha de inscripción : 07/01/2011
Edad : 35
Localización : en UEPOPUTOPIA : soy la princesa hada que sirve al principito Ueda
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
Jajajajaja! Lo dijeeeee! Amo las contis regordetas!! Bonitaaas y gorditaas!
Hijaaaaa bravo!!
*3* pi con problemas de excitabilidad jajajajajja... Le va a doler al pobre! Y kyuuuuuuuu pi x dios!!! Atenderte en el baño??? Y en el baño de chikos!!! Con extraños olores y cosaaas... Kyuu~ ... T va a dar una infección y luego ni Tego t va a poder ayudar¡¡ Ademas diiiicen~ que salen pelos en las manos¡¡¡XD no nooo awantece Pi!
Keii!! Ternurita<3<3 tu kieres casarte y tener hijitos pastelillos!
Maruuuuu jajajajajajajajajajaja un caballo??? Mejor una granadaaa!!! Jajajajajajajaja diosss lo ameeee!!!
Shige...cosito lindo... Llorando en un parque recibe un durazno!!... Wooooo llorare afuera del super!!!! Tal vez me gane una despensa jajajaja!!!!
Y Ryo... Haa.. No no no... ryo.. Si estas viendo lo que pasa.... Pobre Shige llorando y tu espiandolo! No eres para consolarlo y encima! Le h echas a perder el.dutazno que tantas lágrimas le costoo!!!! Grrrrrrrrrr
Y bueeee.... ;-; ...Kaaaaaaaaaaaaaaameee nooooo !!! No te vallas! Vee el pobre de Jin sufreeee.. Y t vas no solo a otra ciudad!!! Te va ..no solo a otro pais! Te vas a otro continenteeee lejos del baka..... Espera!... Woooo siiiiii kame venteeee!! Yo aki te espero! Jujujujuuuuuu siii deja al baka de Jin a ver si ahora si te valora..espera! Jin siempre te ha valoradi... Tú eres kien no valora a Jin Jin! ....
Woooooooo quiero otra conti bonita y gordita!
Hijaaaaa bravo!!
*3* pi con problemas de excitabilidad jajajajajja... Le va a doler al pobre! Y kyuuuuuuuu pi x dios!!! Atenderte en el baño??? Y en el baño de chikos!!! Con extraños olores y cosaaas... Kyuu~ ... T va a dar una infección y luego ni Tego t va a poder ayudar¡¡ Ademas diiiicen~ que salen pelos en las manos¡¡¡XD no nooo awantece Pi!
Keii!! Ternurita<3<3 tu kieres casarte y tener hijitos pastelillos!
Maruuuuu jajajajajajajajajajaja un caballo??? Mejor una granadaaa!!! Jajajajajajajaja diosss lo ameeee!!!
Shige...cosito lindo... Llorando en un parque recibe un durazno!!... Wooooo llorare afuera del super!!!! Tal vez me gane una despensa jajajaja!!!!
Y Ryo... Haa.. No no no... ryo.. Si estas viendo lo que pasa.... Pobre Shige llorando y tu espiandolo! No eres para consolarlo y encima! Le h echas a perder el.dutazno que tantas lágrimas le costoo!!!! Grrrrrrrrrr
Y bueeee.... ;-; ...Kaaaaaaaaaaaaaaameee nooooo !!! No te vallas! Vee el pobre de Jin sufreeee.. Y t vas no solo a otra ciudad!!! Te va ..no solo a otro pais! Te vas a otro continenteeee lejos del baka..... Espera!... Woooo siiiiii kame venteeee!! Yo aki te espero! Jujujujuuuuuu siii deja al baka de Jin a ver si ahora si te valora..espera! Jin siempre te ha valoradi... Tú eres kien no valora a Jin Jin! ....
Woooooooo quiero otra conti bonita y gordita!
DANNYKAZU- Mensajes : 627
Fecha de inscripción : 29/06/2011
Edad : 37
Localización : en el caparazon de kazu
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
por dios con lo del caballo mori de risa dios nakamaru ke rayos tienes en la cabeza xDDDDDDD me gusta como piensa y es maru aveces puede ser un seductor otras muy senpai y jodidamente maduro.. y otras tan baka me encantaaa!!!
pi oh dios ame tus celos!! asdasd pero ke ya deje a maki ke rayos me estresa y ya kiero ver tego pi amandose y siendo felices
no voy a hablar de shige y ryo.. porke ryo.. puto ojala mueras maldito! revive solo si le vas a aclarar tus sentimientos a mi shige hermoso
y kame se va.. KAMEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE ;^;!!!! nu te vayas y lo dejes con ueda.. eres un imbesil ;^;!!!!
Fa te odio me kitas mi akame ;^^^^^^^^^^^^;;!!!!!!!
pi oh dios ame tus celos!! asdasd pero ke ya deje a maki ke rayos me estresa y ya kiero ver tego pi amandose y siendo felices
no voy a hablar de shige y ryo.. porke ryo.. puto ojala mueras maldito! revive solo si le vas a aclarar tus sentimientos a mi shige hermoso
y kame se va.. KAMEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE ;^;!!!! nu te vayas y lo dejes con ueda.. eres un imbesil ;^;!!!!
Fa te odio me kitas mi akame ;^^^^^^^^^^^^;;!!!!!!!
Usagi- Mensajes : 90
Fecha de inscripción : 13/09/2011
Edad : 34
Localización : con Teshi a mi lado♥ *w*
Re: Abriendo camino [NishiKato, TegoPi, MassuMaru]
[Kato]
La última semana pasó rápido, como si quisiera separarnos más pronto. El aura de todos se volvió gris. Ayudamos a Keii-chan a preparar la fiesta de Kame, sin ganas. No entiendo ¿por qué festejar cuando te despides? Nadie está de humor para eso, el ambiente está lleno de sonrisas falsas que parecen tenebrosas si las miras con atención.
Kusano también nos ha ayudado, más bien por obligación que por gusto. La cercanía entre él y Keii se ve cada vez más estropeada; pasan el uno junto al otro y ni siquiera se miran.
Fuimos invitados aun sin ser parte del equipo, pero Keii-chan lo pidió así; ninguno de nosotros lo disfrutó. Él que lo pasó peor de nosotros fue Keii, quien tuvo que fingir, como buen capitán de su equipo, que todo estaba bien. También Kame tuvo que mostrar una sonrisa tan triste y fingida que hizo me sentara mal al estómago.
Todo el rato estuve tratando de hablar con Kusano y él se la ha pasado evitándome. Ahora sale del gimnasio, donde estamos haciendo la fiesta. Voy tras él y lo veo entrar al baño, está en los lavabos mojándose la cara, se mira al espejo y suspira, creo que es una buena oportunidad para hablar con él.
Me mira por el espejo con intención de salir de allí pero lo acorralo como puedo.
-¿Acaso quieres que te rompa la cara? – Y empieza de agresivo.
-Sólo quiero hablar.
-¡Pero yo no quiero hablar contigo!
-Kusano… yo entiendo por lo que estás pasando…
-¿¡Qué va a saber un empollón estúpido cómo tu!? – Ahora empieza con los insultos.
-Kusano… ¿te gusta Keii-chan verdad? – Mira de un lado a otro nervioso, eso es un sí seguro. Me mira, creo que le estoy dando confianza… no…
-¡Idiota! – Se abre paso empujándome hacia los lavabos y sale del baño. Las personas son así: insultan, golpean o se hacen los ciegos y sordos para evadir la verdad… o más bien son respuestas afirmativas dichas con urgencia, si no fuese cierto sólo negarlo ¿para qué tener que recurrir a esto?
Me levanto del suelo. Me le golpeado la cabeza con el borde del lavabo y ahora estoy sangrando, no es mucho, pero será mejo que lo oculte, no quiero causar más problemas, suficiente es lo que nos abruma para preocupar a los chicos por algo insignificante. Salgo del baño aunque la sangre no para y camino ocultándome en el patio trasero del colegio.
-Pero si aquí está Shige-chan. – Volteo mi mirada a la voz femenina que me llama. Apenas logro ver una sonrisa asomándose por el muro que divide los dos colegios.
-¡Aya-chan! – La reconozco de inmediato, nada en especial, pero ahora que hago una recapitulación, es la única chica que conozco.
-Parece que vagas cómo alma en pena. – Sonríe con aire burlón y yo desvío la mirada con una mueca; es tan parecida a Ryo que me da miedo.
-¡Ah! ¡Estás lastimado! – Sin chistar sube a la barda ¿cómo lo ha hecho tan fácil? Salta hacía mí de forma tan inesperada; veo el movimiento juguetón del viento sobre su falda dejando visibles sus bragas azul cielo, desvío la mirada de inmediato completamente avergonzado. Cuando me doy cuenta ya estoy en el piso con Aya encima.
-¡Débil! – Me reclama ella quejándose.
-¡No estaba preparado! – Me defiendo.
-Ese es tu problema – dice levantándose y ofreciéndome su mano para incorporarme también – nunca estás preparado.
-No entiendo.
-Crees que la vida es automática, fácil y predecible, por eso te has herido la cabeza, por eso llorabas en el parque el otro día y por eso he caído encima de ti sin que pudieses hacer nada. – Le miro y pienso entonces lo que ha dicho. Pensaba que bastaba con amar a alguien para ser correspondido; pensaba que si hacía sentir a Kusano en un estado empático podríamos hablar bien y entendernos y por supuesto, pensé que Aya caería lejos de mí porque la gente no cae encima de otras gentes. - ¿Tengo razón? – Cuestiona en un tono burlón que la hace ver superior.
-Creo…
-Aunque ahora ya no se puede hacer mucho, sólo curar eso – toma mi mano y me lleva de regreso al baño, y yo pensaba que las chicas no podían entrar al baño de chicos, sí, sí, yo pienso muchas cosas que no son ciertas, al parecer soy alguien que vive eternamente equivocado.
Lava un poco mi herida y después coloca una bandita sobre esta.
-Gracias.
-No arregla mucho pero… se siente mejor ¿no? – Sonríe y asiento, ella me devuelve la sonrisa – quizás también puedas aceptar una bandita para tu corazón – su rostro se pinta de un adorable carmín. ¿Bandita para el corazón? Le miro sin entender y ella sólo desvía la mirada – mejor me voy. – Y sin darme tiempo a más sale corriendo del baño.
-¿Y quién es la chica linda? – Reconozco la voz y giro mi vista hacía Akanishi que está recargado en la puerta de una de las casetas del baño. Sonreímos sin decir nada más.
[Koyama]
No es una tarde divertida como la de cada fin de semestre. Yu-chan está demasiado preocupado, demasiado silencioso y ausente. Masu lo está evitando. Esta última semana su madre ha estado yendo a dejarlo y a recogerlo al colegio todos los días; en los descansos lo evita. Yu-chan entiende que no es culpa de Masu, pero aun así le duele.
Les pedí a todos que pasáramos la noche buena juntos, como un último recuerdo para Kamenashi y aunque aparentan verse emocionados yo sé que en el fondo las celebraciones no les interesan en lo más mínimo. Nunca había enfrentado tantas preocupaciones a la vez.
-Planeaba tener una cita con Masu… llevarle a cenar o algo… pasar juntos la navidad… -suspiró. Ver a mi mejor amigo así me partió el corazón. Entiendo lo que es que te quieran alejar de la persona que amas, pero mi caso no es nada parecido al suyo.
-La tendrás Yu-chan ¡me encargaré de eso! – No sabía ni lo que estaba diciendo.
-Pero Keii-chan… ¿qué pasa con sus padres? Y… ¿la fiesta?
-¡Al diablo la fiesta! Es más importante ahora que tú estés bien Nakamaru. -Rió y me sentí más tranquilo.
[Kato]
Todos están aquí sonrientes. Es la primera vez que celebro noche buena de esta forma. El restaurante cerró temprano hoy y ahora es todo nuestro. Hay comida de sobra, música e incluso decoraron. Los chicos hablan entre ellos fingiendo estar contentos. He visto a Akanishi de cerca y sé que en cualquier momento se soltará a llorar, pero por alguna razón, sonríe.
De nuevo los días pasaron rápidos… sin embargo esta noche ha sido bastante lenta, siento como si hubiésemos estado horas aquí encerrados aunque sólo han pasado unos minutos desde que todos llegaron; no me gusta este
ambiente.
Ryo pasa de mí. Ni siquiera me mira, apenas y me saludó. ¿Es que acaso y tuve la culpa de lo que pasó? He estado tratando de olvidarlo todo este tiempo y él no me deja, ¿por qué?
-¡Maki-chan! – Volteamos todos a la puerta. Dos ojos tímidos se asomaban desde ahí. Faldas de colores, adornos brillantes.
-Sentimos llegar tarde – voz chillona.
-Con permiso… - voz que reconocí.
-¡Aya-chan! – Cuando fijé bien mi rostro supe de inmediato quien era.
-¡Shige! Ella vino hacia mí corriendo de forma espontanea cómo era su costumbre y me abrazó fuertemente. – No esperaba encontrarte aquí, a decir vedad no quería venir con Maki, pero ahora que te veo aquí hace que no me arrepienta.
Silencio total, mientras ella hablaba sin parar yo notaba que todos nos observaban.
-¡Ah! ¿Es la chica del otro día? – Akanishi retiró todas las miradas de nosotros con esa pregunta - ¡lo sabía! ¡Es tu novia! – Y nos la devolvió con esa afirmación.
-¡Felicidades! – Mi hermano mayor no hizo esperar.
-¡¿Eh?! – Aya-chan reaccionó tarde, pero aun así agradezco que por fin me suelte antes de que me deje sin costillas. - ¡No es lo que piensan!
Pero nadie escuchó, todos estaban ocupados codeándose, palmeándome, haciendo conjeturas. Odio que crean cosas que no son.
-¡Oye Ryo! – Cuando giro mi mirada a la puerta, veo el rastro de alguien que se fue. - ¿Qué le pasa a este bruto? – Yamashita, al parecer, ha sido el único que se dio cuenta de eso.
-¡Ryo! – De alguna manera me siento agitado, como si tuviera un mal presentimiento. - ¡Shige! – Volteo hacia Koyama, no sé si está pronunciando nombres al azar o quiere decirme algo. Entonces todos me miraron como queriendo decir algo ¡claro! Ryo es mi mejor amigo… como Akanishi corrió esa noche por Kamenashi; cómo Keii-chan siempre sabe si algo le pasa a Nakamaru-kun… como Yamashita siempre cuida a Tegoshi… Ryo es mi responsabilidad.
Voy tras él aunque ya me lleva varias calles de ventaja. No me quiero arriesgar a que no me abra la puerta, pero tengo miedo de que no me abra la ventana tampoco ¿sería tan cruel? Quizás deba probar. Subo como ya lo había hecho antes y llamo a la ventana. La noche está fría y hasta hace unas horas nevaba por lo que el barandal es imposible de sostener firmemente.
-¡Ryo! Ábreme. – Se que me ha escuchado, porque es imposible no hacerlo y sé que está despierto porque ha prendido la lámpara de pie. – Anda… hace frío… -le ruego.
-Yo no te pedí que vinieras – se asoma con malicia.
-Vine porque quise… déjame entrar… - en serio estoy a punto de resbalar. Ryo decide abrirme la ventana por fin. Y entro sin pensarlo dos veces.
-¿Qué quieres? – Cuestiona tumbándose en la cama con un libro en mano.
-¿Por qué te fuiste así? Nos dejaste preocupados –respondo sentándome despacio junto a él.
-¿Viniste por qué los chicos te dijeron qué lo hicieras?
-Vine porque quise… ¿por qué te fuiste así, Ryo? ¿Pasó algo?
Silencio.
-¿Ryo?
-Ella… - aleja ligeramente el libro – esa chica… - me mira – ¿es tu novia?
-No lo es - mi única y verdadera respuesta.
-Ya veo… - y por alguna razón lo veo más tranquilo. Entonces recuerdo lo que pasó con el durazno y la forma en la que me veía era la misma de hace un momento… la misma forma en la que Kusano ve a Keii-chan cuando está conmigo.
-¿Estás celoso Ryo? – Le solté sin pensar, aunque los nervios ahora me han absorbido completamente; ¡¿cómo pasó?! Aunque ahora, sólo quiero saber su respuesta, pero él no habla, hay demasiado silencio. Estamos tan cerca, mi culpa, claro, porque de verdad me interesa su respuesta. Quiero ver su rostro cuando me conteste, quiero saber si miente o si es sincero… quiero oír lo que sea que tenga qué decirme.
Me mira.
Traga saliva, nervioso, de forma que puedo escucharlo e incluso hago lo mismo.
-Si… - … - estoy celoso…
Lo está… eso significa que… dentro de él… hay sentimientos hacia mí.
Puedo escuchar claramente el bullicio de los vecinos. El silencio que hay ahora en la habitación parece interminable. No sé qué decir ante su respuesta y Ryo sólo me mira como teniendo miedo de desviar la mirada. Hasta que rompe el silencio y me deja boquiabierto.
-Porque tú eres mío Shige…
Se ha acercado tan rápido que ni lo he notado, me ha besado tan rápido que mi corazón se detuvo por largos segundos que parecieron eternos minuto en que mi respiración se paralizó también.
Ryo me besó; no cómo las veces anteriores. Sabía diferente… a necesidad… a represión… a amor. Algo que quería explotar desde hace mucho estaba saliendo en ese beso que me hizo apretar fuertemente los ojos. Nada existe ahora. Sólo los labios de Ryo amoldándose de forma perfecta a los míos.
Así pasamos minutos. Moviéndonos de forma ansiosa en esa cama; enrollando sus sábanas, tumbando los libros al suelo; sólo besándonos, abrazándonos, aferrándonos el uno al otro. No sé si siento felicidad… lo es… pero diferente. Es cómo una necesidad de más que revienta en mi vientre.
Su lengua dentro de mi boca. Nunca pensé que algo que se describe tan asqueroso se sintiera tan bien, tan suave y húmedo a la vez.
Las manos de Ryo me acariciaban sin vergüenza y yo me estremecí bajo sus brazos con cada tacto de sus dedos en mi piel bajo mi ropa. Porque había ya invadido esa zona privada de mí hace minutos, yo tengo miedo a hacer lo mismo, pero quiero sentirlo… porque él es mío y yo soy suyo…
Es la primera vez que alguien me toca de esta forma, pero sé que es normal porque, lo he visto el otro día en una película; y aunque trato de imitar lo que los actores hacían es difícil, porque mis manos se mueven sin obedecer a mi cerebro. Nada obedece a mi cerebro ahora. Incluso he empezado a temblar aunque no siento miedo.
-No tengas miedo – Ryo susurra, pero que ¡no tengo miedo! – Seré gentil… - ¿Ryo gentil?
-Algo que he querido desde hace mucho – es lo único que responde. ¿Mucho?
Entre más besos y caricias Ryo ya me ha desnudado y a él también, no he podido ayudarle porque el temblor en mis manos no me ha dejado, pero con su destreza consiguió que nuestros cuerpos estuviesen completamente desnudos rosándose sin reparo.
Mi respiración se agita. Algo me está llenando por completo, algo que no se explicar porque nubla todos mis pensamientos. Ryo-chan también respira agitado e incluso jadea; sonrío, significa eso que está disfrutando esto tanto como yo.
Pero algo ya no está siendo normal. Ryo lamió dos de sus dedos y ahora los está introduciendo por un sitio que no debería tocar. Me sonrojo, esto me da mucha vergüenza ¿por qué me toca ahí sin pena? Sólo desvío la mirada y muerdo los labios porque a pesar de que no es correcto… se siente demasiado bien.
Mi miembro está bien erecto ya. El suyo contra mi muslos se siente palpitante, y duro también. Gemidos salen de mi boca, uno tras otro, me estremezco cuando sus dedos dejan de acariciarme, siento el espacio vacío que han dejado, el que es pronto llenado con algo más grande, mucho más grande.
-¡Aaah! Ryo… q-qué… - no puedo ni articular palabra, duele, me duele mucho.
-Tranquilo… Shige – Ryo también gime, sus jadeos y su respiración chocan contra mi oído, su pecho se pega a mi espalda mientras si piernas me rodean y sus tobillos se agarran impulsándome contra él. Me penetra, es eso… estamos haciendo el amor de una forma poco usual, diferente a como había leído que debía ser el sexo.
Es demasiado para mí, estoy tan excitado que eyaculo casi de inmediato. Ryo tarda un poco más pero al final puedo sentir cómo su semen recorre mi pierna. Espasmos en su vientre que llegan a mi espalda y atraviesan mi cuerpo.
Cansancio…
La última semana pasó rápido, como si quisiera separarnos más pronto. El aura de todos se volvió gris. Ayudamos a Keii-chan a preparar la fiesta de Kame, sin ganas. No entiendo ¿por qué festejar cuando te despides? Nadie está de humor para eso, el ambiente está lleno de sonrisas falsas que parecen tenebrosas si las miras con atención.
Kusano también nos ha ayudado, más bien por obligación que por gusto. La cercanía entre él y Keii se ve cada vez más estropeada; pasan el uno junto al otro y ni siquiera se miran.
Fuimos invitados aun sin ser parte del equipo, pero Keii-chan lo pidió así; ninguno de nosotros lo disfrutó. Él que lo pasó peor de nosotros fue Keii, quien tuvo que fingir, como buen capitán de su equipo, que todo estaba bien. También Kame tuvo que mostrar una sonrisa tan triste y fingida que hizo me sentara mal al estómago.
Todo el rato estuve tratando de hablar con Kusano y él se la ha pasado evitándome. Ahora sale del gimnasio, donde estamos haciendo la fiesta. Voy tras él y lo veo entrar al baño, está en los lavabos mojándose la cara, se mira al espejo y suspira, creo que es una buena oportunidad para hablar con él.
Me mira por el espejo con intención de salir de allí pero lo acorralo como puedo.
-¿Acaso quieres que te rompa la cara? – Y empieza de agresivo.
-Sólo quiero hablar.
-¡Pero yo no quiero hablar contigo!
-Kusano… yo entiendo por lo que estás pasando…
-¿¡Qué va a saber un empollón estúpido cómo tu!? – Ahora empieza con los insultos.
-Kusano… ¿te gusta Keii-chan verdad? – Mira de un lado a otro nervioso, eso es un sí seguro. Me mira, creo que le estoy dando confianza… no…
-¡Idiota! – Se abre paso empujándome hacia los lavabos y sale del baño. Las personas son así: insultan, golpean o se hacen los ciegos y sordos para evadir la verdad… o más bien son respuestas afirmativas dichas con urgencia, si no fuese cierto sólo negarlo ¿para qué tener que recurrir a esto?
Me levanto del suelo. Me le golpeado la cabeza con el borde del lavabo y ahora estoy sangrando, no es mucho, pero será mejo que lo oculte, no quiero causar más problemas, suficiente es lo que nos abruma para preocupar a los chicos por algo insignificante. Salgo del baño aunque la sangre no para y camino ocultándome en el patio trasero del colegio.
-Pero si aquí está Shige-chan. – Volteo mi mirada a la voz femenina que me llama. Apenas logro ver una sonrisa asomándose por el muro que divide los dos colegios.
-¡Aya-chan! – La reconozco de inmediato, nada en especial, pero ahora que hago una recapitulación, es la única chica que conozco.
-Parece que vagas cómo alma en pena. – Sonríe con aire burlón y yo desvío la mirada con una mueca; es tan parecida a Ryo que me da miedo.
-¡Ah! ¡Estás lastimado! – Sin chistar sube a la barda ¿cómo lo ha hecho tan fácil? Salta hacía mí de forma tan inesperada; veo el movimiento juguetón del viento sobre su falda dejando visibles sus bragas azul cielo, desvío la mirada de inmediato completamente avergonzado. Cuando me doy cuenta ya estoy en el piso con Aya encima.
-¡Débil! – Me reclama ella quejándose.
-¡No estaba preparado! – Me defiendo.
-Ese es tu problema – dice levantándose y ofreciéndome su mano para incorporarme también – nunca estás preparado.
-No entiendo.
-Crees que la vida es automática, fácil y predecible, por eso te has herido la cabeza, por eso llorabas en el parque el otro día y por eso he caído encima de ti sin que pudieses hacer nada. – Le miro y pienso entonces lo que ha dicho. Pensaba que bastaba con amar a alguien para ser correspondido; pensaba que si hacía sentir a Kusano en un estado empático podríamos hablar bien y entendernos y por supuesto, pensé que Aya caería lejos de mí porque la gente no cae encima de otras gentes. - ¿Tengo razón? – Cuestiona en un tono burlón que la hace ver superior.
-Creo…
-Aunque ahora ya no se puede hacer mucho, sólo curar eso – toma mi mano y me lleva de regreso al baño, y yo pensaba que las chicas no podían entrar al baño de chicos, sí, sí, yo pienso muchas cosas que no son ciertas, al parecer soy alguien que vive eternamente equivocado.
Lava un poco mi herida y después coloca una bandita sobre esta.
-Gracias.
-No arregla mucho pero… se siente mejor ¿no? – Sonríe y asiento, ella me devuelve la sonrisa – quizás también puedas aceptar una bandita para tu corazón – su rostro se pinta de un adorable carmín. ¿Bandita para el corazón? Le miro sin entender y ella sólo desvía la mirada – mejor me voy. – Y sin darme tiempo a más sale corriendo del baño.
-¿Y quién es la chica linda? – Reconozco la voz y giro mi vista hacía Akanishi que está recargado en la puerta de una de las casetas del baño. Sonreímos sin decir nada más.
[Koyama]
No es una tarde divertida como la de cada fin de semestre. Yu-chan está demasiado preocupado, demasiado silencioso y ausente. Masu lo está evitando. Esta última semana su madre ha estado yendo a dejarlo y a recogerlo al colegio todos los días; en los descansos lo evita. Yu-chan entiende que no es culpa de Masu, pero aun así le duele.
Les pedí a todos que pasáramos la noche buena juntos, como un último recuerdo para Kamenashi y aunque aparentan verse emocionados yo sé que en el fondo las celebraciones no les interesan en lo más mínimo. Nunca había enfrentado tantas preocupaciones a la vez.
-Planeaba tener una cita con Masu… llevarle a cenar o algo… pasar juntos la navidad… -suspiró. Ver a mi mejor amigo así me partió el corazón. Entiendo lo que es que te quieran alejar de la persona que amas, pero mi caso no es nada parecido al suyo.
-La tendrás Yu-chan ¡me encargaré de eso! – No sabía ni lo que estaba diciendo.
-Pero Keii-chan… ¿qué pasa con sus padres? Y… ¿la fiesta?
-¡Al diablo la fiesta! Es más importante ahora que tú estés bien Nakamaru. -Rió y me sentí más tranquilo.
[Kato]
Todos están aquí sonrientes. Es la primera vez que celebro noche buena de esta forma. El restaurante cerró temprano hoy y ahora es todo nuestro. Hay comida de sobra, música e incluso decoraron. Los chicos hablan entre ellos fingiendo estar contentos. He visto a Akanishi de cerca y sé que en cualquier momento se soltará a llorar, pero por alguna razón, sonríe.
De nuevo los días pasaron rápidos… sin embargo esta noche ha sido bastante lenta, siento como si hubiésemos estado horas aquí encerrados aunque sólo han pasado unos minutos desde que todos llegaron; no me gusta este
ambiente.
Ryo pasa de mí. Ni siquiera me mira, apenas y me saludó. ¿Es que acaso y tuve la culpa de lo que pasó? He estado tratando de olvidarlo todo este tiempo y él no me deja, ¿por qué?
-¡Maki-chan! – Volteamos todos a la puerta. Dos ojos tímidos se asomaban desde ahí. Faldas de colores, adornos brillantes.
-Sentimos llegar tarde – voz chillona.
-Con permiso… - voz que reconocí.
-¡Aya-chan! – Cuando fijé bien mi rostro supe de inmediato quien era.
-¡Shige! Ella vino hacia mí corriendo de forma espontanea cómo era su costumbre y me abrazó fuertemente. – No esperaba encontrarte aquí, a decir vedad no quería venir con Maki, pero ahora que te veo aquí hace que no me arrepienta.
Silencio total, mientras ella hablaba sin parar yo notaba que todos nos observaban.
-¡Ah! ¿Es la chica del otro día? – Akanishi retiró todas las miradas de nosotros con esa pregunta - ¡lo sabía! ¡Es tu novia! – Y nos la devolvió con esa afirmación.
-¡Felicidades! – Mi hermano mayor no hizo esperar.
-¡¿Eh?! – Aya-chan reaccionó tarde, pero aun así agradezco que por fin me suelte antes de que me deje sin costillas. - ¡No es lo que piensan!
Pero nadie escuchó, todos estaban ocupados codeándose, palmeándome, haciendo conjeturas. Odio que crean cosas que no son.
-¡Oye Ryo! – Cuando giro mi mirada a la puerta, veo el rastro de alguien que se fue. - ¿Qué le pasa a este bruto? – Yamashita, al parecer, ha sido el único que se dio cuenta de eso.
-¡Ryo! – De alguna manera me siento agitado, como si tuviera un mal presentimiento. - ¡Shige! – Volteo hacia Koyama, no sé si está pronunciando nombres al azar o quiere decirme algo. Entonces todos me miraron como queriendo decir algo ¡claro! Ryo es mi mejor amigo… como Akanishi corrió esa noche por Kamenashi; cómo Keii-chan siempre sabe si algo le pasa a Nakamaru-kun… como Yamashita siempre cuida a Tegoshi… Ryo es mi responsabilidad.
Voy tras él aunque ya me lleva varias calles de ventaja. No me quiero arriesgar a que no me abra la puerta, pero tengo miedo de que no me abra la ventana tampoco ¿sería tan cruel? Quizás deba probar. Subo como ya lo había hecho antes y llamo a la ventana. La noche está fría y hasta hace unas horas nevaba por lo que el barandal es imposible de sostener firmemente.
-¡Ryo! Ábreme. – Se que me ha escuchado, porque es imposible no hacerlo y sé que está despierto porque ha prendido la lámpara de pie. – Anda… hace frío… -le ruego.
-Yo no te pedí que vinieras – se asoma con malicia.
-Vine porque quise… déjame entrar… - en serio estoy a punto de resbalar. Ryo decide abrirme la ventana por fin. Y entro sin pensarlo dos veces.
-¿Qué quieres? – Cuestiona tumbándose en la cama con un libro en mano.
-¿Por qué te fuiste así? Nos dejaste preocupados –respondo sentándome despacio junto a él.
-¿Viniste por qué los chicos te dijeron qué lo hicieras?
-Vine porque quise… ¿por qué te fuiste así, Ryo? ¿Pasó algo?
Silencio.
-¿Ryo?
-Ella… - aleja ligeramente el libro – esa chica… - me mira – ¿es tu novia?
-No lo es - mi única y verdadera respuesta.
-Ya veo… - y por alguna razón lo veo más tranquilo. Entonces recuerdo lo que pasó con el durazno y la forma en la que me veía era la misma de hace un momento… la misma forma en la que Kusano ve a Keii-chan cuando está conmigo.
-¿Estás celoso Ryo? – Le solté sin pensar, aunque los nervios ahora me han absorbido completamente; ¡¿cómo pasó?! Aunque ahora, sólo quiero saber su respuesta, pero él no habla, hay demasiado silencio. Estamos tan cerca, mi culpa, claro, porque de verdad me interesa su respuesta. Quiero ver su rostro cuando me conteste, quiero saber si miente o si es sincero… quiero oír lo que sea que tenga qué decirme.
Me mira.
Traga saliva, nervioso, de forma que puedo escucharlo e incluso hago lo mismo.
-Si… - … - estoy celoso…
Lo está… eso significa que… dentro de él… hay sentimientos hacia mí.
Puedo escuchar claramente el bullicio de los vecinos. El silencio que hay ahora en la habitación parece interminable. No sé qué decir ante su respuesta y Ryo sólo me mira como teniendo miedo de desviar la mirada. Hasta que rompe el silencio y me deja boquiabierto.
-Porque tú eres mío Shige…
Se ha acercado tan rápido que ni lo he notado, me ha besado tan rápido que mi corazón se detuvo por largos segundos que parecieron eternos minuto en que mi respiración se paralizó también.
Ryo me besó; no cómo las veces anteriores. Sabía diferente… a necesidad… a represión… a amor. Algo que quería explotar desde hace mucho estaba saliendo en ese beso que me hizo apretar fuertemente los ojos. Nada existe ahora. Sólo los labios de Ryo amoldándose de forma perfecta a los míos.
Así pasamos minutos. Moviéndonos de forma ansiosa en esa cama; enrollando sus sábanas, tumbando los libros al suelo; sólo besándonos, abrazándonos, aferrándonos el uno al otro. No sé si siento felicidad… lo es… pero diferente. Es cómo una necesidad de más que revienta en mi vientre.
Su lengua dentro de mi boca. Nunca pensé que algo que se describe tan asqueroso se sintiera tan bien, tan suave y húmedo a la vez.
Las manos de Ryo me acariciaban sin vergüenza y yo me estremecí bajo sus brazos con cada tacto de sus dedos en mi piel bajo mi ropa. Porque había ya invadido esa zona privada de mí hace minutos, yo tengo miedo a hacer lo mismo, pero quiero sentirlo… porque él es mío y yo soy suyo…
Es la primera vez que alguien me toca de esta forma, pero sé que es normal porque, lo he visto el otro día en una película; y aunque trato de imitar lo que los actores hacían es difícil, porque mis manos se mueven sin obedecer a mi cerebro. Nada obedece a mi cerebro ahora. Incluso he empezado a temblar aunque no siento miedo.
-No tengas miedo – Ryo susurra, pero que ¡no tengo miedo! – Seré gentil… - ¿Ryo gentil?
-Algo que he querido desde hace mucho – es lo único que responde. ¿Mucho?
Entre más besos y caricias Ryo ya me ha desnudado y a él también, no he podido ayudarle porque el temblor en mis manos no me ha dejado, pero con su destreza consiguió que nuestros cuerpos estuviesen completamente desnudos rosándose sin reparo.
Mi respiración se agita. Algo me está llenando por completo, algo que no se explicar porque nubla todos mis pensamientos. Ryo-chan también respira agitado e incluso jadea; sonrío, significa eso que está disfrutando esto tanto como yo.
Pero algo ya no está siendo normal. Ryo lamió dos de sus dedos y ahora los está introduciendo por un sitio que no debería tocar. Me sonrojo, esto me da mucha vergüenza ¿por qué me toca ahí sin pena? Sólo desvío la mirada y muerdo los labios porque a pesar de que no es correcto… se siente demasiado bien.
Mi miembro está bien erecto ya. El suyo contra mi muslos se siente palpitante, y duro también. Gemidos salen de mi boca, uno tras otro, me estremezco cuando sus dedos dejan de acariciarme, siento el espacio vacío que han dejado, el que es pronto llenado con algo más grande, mucho más grande.
-¡Aaah! Ryo… q-qué… - no puedo ni articular palabra, duele, me duele mucho.
-Tranquilo… Shige – Ryo también gime, sus jadeos y su respiración chocan contra mi oído, su pecho se pega a mi espalda mientras si piernas me rodean y sus tobillos se agarran impulsándome contra él. Me penetra, es eso… estamos haciendo el amor de una forma poco usual, diferente a como había leído que debía ser el sexo.
Es demasiado para mí, estoy tan excitado que eyaculo casi de inmediato. Ryo tarda un poco más pero al final puedo sentir cómo su semen recorre mi pierna. Espasmos en su vientre que llegan a mi espalda y atraviesan mi cuerpo.
Cansancio…
Kashi- Mensajes : 185
Fecha de inscripción : 15/08/2011
Localización : Johnny's Land [acosando a Goseki con Koyama]
Página 5 de 6. • 1, 2, 3, 4, 5, 6
Temas similares
» please i need a second chance [ nishikato ]
» 11:11 (Tegomasu, Nishikato)(4/?)
» Al fin juntos [TegoPi] [Cap. 8 de 8 On going~] by Senko & Taliz
» Idol Empire [TegoMass/ TegoPi]
» NISHIKATO " CUENTAME..." SHOT
» 11:11 (Tegomasu, Nishikato)(4/?)
» Al fin juntos [TegoPi] [Cap. 8 de 8 On going~] by Senko & Taliz
» Idol Empire [TegoMass/ TegoPi]
» NISHIKATO " CUENTAME..." SHOT
Fiction Asian Lovers :: Fan Fics :: Boy x Boy Love :: Proccess :: Johhny's
Página 5 de 6.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Jue Feb 13, 2014 3:11 pm por smily23
» Amo mi trabajo: Personajes: Jin Akanishi, Nishikido Ryo, Ueda Ttatsuya, Alguien a quien no supe ponerle nombre, lo llamo Xchan!
Vie Ene 31, 2014 2:39 am por Princesa Saranini de Ueda
» TaNaka: “IMPREGNADO A TU PIEL” Parte 2
Lun Dic 09, 2013 12:28 am por Saku-chan
» MY LOVE AKAME
Lun Dic 09, 2013 12:22 am por Saku-chan
» ***NEWS***
Miér Oct 09, 2013 8:08 pm por andreita26
» HOLA A TODOS
Miér Oct 09, 2013 8:05 pm por andreita26
» A TRAVEZ DEL TIEMPO NUESTRO AMOR DURARA
Dom Sep 22, 2013 1:39 am por Yuya Danae
» TE AMARE POR SIEMPRE - AKAME ♥
Dom Sep 22, 2013 12:30 am por Yuya Danae
» RECUERDAME (AKAME)
Lun Sep 09, 2013 6:19 pm por yuhi_ kamenashi